La Policía Local de Cádiz ha despedido del mes de junio con un fin de semana intenso, atendiendo a diversas incidencias que han requerido su intervención. Entre las más relevantes, destaca un atropello con heridos graves, la retirada de 40 garrafas de combustible de las playas de la ciudad y una detención por amenazas tras negarse a pagar la cuenta en una cafetería.
El hecho más destacado fue el atropello ocurrido la madrugada del sábado en la avenida Salud Pública con Santo Tomás. Una motocicleta que intentó evitar a un peatón que se encontraba en medio de la calzada no pudo esquivarlo, resultando ambos gravemente heridos.
El conductor circulaba por la vía en sentido salida de la ciudad cuando vio al peatón en el centro de la calzada. El motorista intentó esquivarlo, pero el peatón se movió en la misma dirección, lo que hizo imposible evitar el impacto. Según la inspección ocular de la Policía Local y los testimonios de los testigos, el peatón se encontraba fuera del paso de cebra en el momento del accidente.
El motorista sufrió una fractura abierta en el tobillo, mientras que el peatón tuvo que ser intervenido quirúrgicamente por una fractura de tibia y peroné. La Policía Local continúa investigando el accidente para determinar las causas del mismo.
Garrafas de combustible en la playa
En las primeras horas del sábado, la Policía Local retiró 40 garrafas de combustible, vacías o llenas, que habían sido arrojadas en la playa de Cádiz, desde Cortadura hasta Victoria. Primero aparecieron algunas y más tarde otras 37.
Las garrafas fueron trasladadas a un depósito habilitado por la Policía Local y se está investigando su origen y las razones por las que fueron abandonadas en la playa.
Detenido por amenazas graves
La Policía Local de Cádiz detuvo a un hombre el viernes 28 de junio por la tarde por amenazas graves a los empleados y la propietaria de una cafetería de la ciudad. El individuo, que se encontraba acompañado de otras tres personas, se negó a pagar las consumiciones y profirió insultos y amenazas a los trabajadores del establecimiento.
Al llegar al lugar, los agentes comprobaron que los cuatro individuos pretendían cometer una estafa, ya que ninguno de ellos portaba dinero para pagar. Tres de ellos fueron identificados, mientras que el cuarto, que fue el autor de las amenazas, fue detenido por un delito de amenazas graves. El detenido cuenta con un amplio historial de antecedentes penales y una orden de prohibición de salir del país.
