Los seres humanos, dentro de los conceptos espirituales, emanan energía que puede visualizarse a su alrededor en forma de colores. La predominancia de unos o la falta de otros nos dice mucho sobre su estado actual.
Cuando se tiene el aura de color rojo el significado que tiene es el de una vida positiva, el ego es positivo, saludable, la persona no es ególatra o narcisista, sino que mira por los demás y es valorado positivamente por quienes le rodean. Es el bienestar y la vida constructiva.
Denota que la persona está apegada a sus seres queridos y cosas que tiene a su alrededor, más allá de todo ello se centra en el momento que vive, en el presente.
No se guarda rencor a nadie o se tiene remordimientos por nada, siempre trata de hacer todo lo mejor posible asumiendo responsabilidades y aceptando el éxito cuando llega o el fracaso.
Quienes tienen el aura roja saben pedir perdón en su momento y también conceder segundas oportunidades sin tener ningún rencor a nadie.
Obviamente, el poder visualizar el aura es algo que está al alcance de muy pocos, sólo aquellos que tienen una sensibilidad especial pueden verlo, aunque también es cierto que se puede hace un sencillo experimento para saber el color que tienes.
Bastará como ponerse la persona delante de una pared de color blanco y concentrarse en la respiración. En ese momento debe dejar transcurrir unos minutos en los que esa concentración haga su efecto.
Se extenderá la mano y se pondrá en la pared, a unos 15 o 20 centímetros y se verá el halo que emana de esta. En función del color el mensaje será tendente a un estado u otro.
El aura no se puede ver a simple vista y exige que la persona sea especialmente sensible, que tenga esa capacidad de percepción.
Qué significa tener el aura rojo
El rojo también es el color de la pasión por lo que habla de personas que son apasionadas, también se la sensualidad que puede poner en juego cuando le gusta otra persona o siente deseos por ella, quiere seducirla.
Es la lujuria cuando el deseo es muy fuerte y el sexo así como las relaciones intimas y atender al instinto primario.
También significa acción, es la actividad física que no tiene que estar necesariamente relacionada con el sexo sino que puede ser deportiva o de tener viajes en mente o a realizar en un breve espacio de tiempo.
En el aura de la persona puede haber varios colores, no sólo uno, pueden existir puntos importantes de fricción que hacen que sea especialmente llamativos y que cada color tenga su significado, aunque siempre sea uno el que predomine.
El color rojo en el aura también puede ser una señal de advertencia, una forma de indicar que hay un peligro cercano y que también puede apelar a la rebeldía o la ira, la venganza.
Siempre debe estar en su justa medida y se valorado como tal pues puede ser sinónimo de triunfo, de éxito, así como de poder alcanzar las metas que se propone la persona.
De la perseverancia y la voluntad siempre se seguir adelante, salvando obstáculos y teniendo la motivación necesaria para alcanzar el objetivo marcado.
Es la competitividad así como el coraje, también significa el aura roja la vitalidad de la persona, el ejercicio y el dinamismo que también se pueden derivar a otras situaciones de la vida.
Si tiene un tono muy intenso -pues puede ser variable- nos hablará de una alta carga energética, así como una gran fortaleza de mente, que hace que sobresalga así como que tenga una gran prestancia para todo aquello que se le propone.
Las personas que tienen el aura roja son muy apasionadas, dan todo lo que llevan dentro en aquello en lo que se implican y propone, sea proyecto, de temas de trabajo o persona.
Es el coraje y también el valor de seguir adelante con los desafíos que se plantean si retroceder, no suelen dar marcha atrás en las decisiones y también tienen ese lado aventurero que es tan singular y que hacen a la persona tan llamativa.
Tienen una gran actitud en la vida e intentar aprender de las lecciones que esta les da por muy duras que puedan ser.
La sensación que tienen siempre es positiva y piden retos importantes y complejos pues saben que los resultados serán, si se logran, muy satisfactorios.
En el amor son sensibles y tremendamente afectuosas/os, de mente abierta, seductoras/es y que miden bien sus impulsos y emociones, no se dejan llevar por los nervios y saben bien lo que quieren.
Tienen una evidente impaciencia, algo que deben saber controlar, pues todo llega a su tiempo, no obstante el tiempo -la edad- les hace ver la vida de otra forma sabiendo que la pasión les puede.
Son materialistas, les motiva el dinero, pues saben que les ayuda a alcanzar grandes metas aunque tampoco les obsesiona.
Este tipo de personas, cuando controlan sus impulsos y pasiones, suelen tener una vida muy satisfactoria y feliz teniendo en cuenta que el color rojo del aura varía y que, en función del momento en el que se encuentre, el tono, matiz o color propio puede ser diferente.