Desde que Edgar Alan Poe escribiera sobre él su figura ha pasado a tener más peso e importancia. No obstante siempre ha sido un ave a tener muy en cuenta en diferentes entornos y sociedades, allá donde se la ha considerado -o considera- un animal sagrado o tótem.
El cuervo tiene un significado espiritual muy importante y aunque su color y su graznido puedan haberlo hecho tener unas connotaciones negativas esto no se ajusta a la realidad, pues puede ser diametralmente opuesto.
En la antigüedad se relacionaba con la muerte y las batallas, sobre todo por que aparecía en estos escenarios. Además es un ave carroñera y estaba, por todo ello, vinculada a la muerte.
Por ejemplo, en la cultura Celta estaba referenciado con Morrigan, una deidad femenina que era la representación de la destrucción, de la fatalidad, de la muerte, aunque y también era una suerte de oráculo en el que poder ver el futuro.
Es una ave superviviente, inteligente, ágil, sagaz, e, incluso, puede verbalizar vocablos que hacen que tenga más valor añadido de lo que se le presupone. Con todo ello es un animal totémico que evoca la Sabiduría, el Conocimiento y la inteligencia.
Es parte del panteón de elementos imprescindibles para todo chamán o mago, para los brujos, y su leyenda está asociada a brujas y hechiceras. Pero su cuerpo espiritual siempre es una alusión al poder, al deseo, a los mensajes que se transmiten, al presagio.
En el Reino Unido se le tiene en alta estima, tanto que dicen que el día que falten los cuervos de la Torre de Londres el imperio británico caerá y, por ello, se les cuida y protege no faltando nunca de este lugar. Puede que sea un ánimo supersticioso, pero ello no quita la influencia y poder que tiene.
También es el símbolo de la mente en culturas nórdicas tal y como se hacía acompañar Odín por dos de estas aves y que tenían una representación tácita con el pensamiento y la información -el cuervo Hugin- y con la mente y la intuición -que era Mugin, el otro ave-.
Así eran ellos los que hablaban al Dios de todo lo que veían y aprendían siendo una especie de consejeros y maestros de esta deidad, tanto que el propio Odín fue llamado como «Dios Cuervo».
Sus propias hijas, las Valkirias, se podrían transformar en esos animales e iban recatando las almas de los fieros guerreros que morían en el campo de batalla para llevarlos al Valhalla, o su equivalente al paraíso.
En otras culturas también se relacionaban con dioses tales como Apolo o la propia Atenea, símbolo -el cuervo- del Sol y de la iluminación mental.
Incluso se narra en esa misma mitología que al principio de los tiempos el cuervo era de color blanco pero dada su incontinencia a guardar secretos se les castigó con ese color -el negro- para que siempre recordaran su pena.
También aparecen en la Biblia, hemos de recordar que Noé el primer animal que lanzó desde el arca tras el Diluvio fue un cuervo, pero no regresó nunca, posteriormente sería una paloma que regresó con una rama de olivo.
Sea como fuere el significado espiritual del cuervo siempre será sinónimo de la transformación interior, de la metamorfosis que toda persona sufre, de las cualidades innatas que nos pueden llevar a algo tan importante como guiarnos de la intuición y poder solventar temas y problemas gracias a ella.
También es un animal chamánico, los propios indios americanos lo entendían como una suerte de oráculo poderoso, cuando aparecía era sinónimo de noticias, de mensajes de los dioses.
Esto era de valor incalculable para la tribu y que lo reverenciaba. Además se le otorgaban poderes curativos y el don de la sanación a distancia.
Aunque parezca paradójico también es el saber oculto, los secretos que se pueden tener y que no saldrán.
Para el eminente psicólogo Carl G. Jung el cuervo tenía un inquietante significado espiritual, pues era «la sombra» y el «lado oscuro» que tiene la psicología de cada persona, aquello que no se muestra y que es parte de ese «otro yo» que toda persona tiene.
Cuervo negro y su significado espiritual
El cuervo será siempre el animal que ejemplifica la sabiduría y la consciencia, el plano del conocimiento máximo y del aprendizaje y, como le ocurriera a Mercurio en la mitología.
Es el mensajero de aquellos que saben interpretar lo que transmite, de brujos y chamanes de la tribu que ante su presencia saben que puede ocurrir o que ha ocurrido, es el mago y el misterio. Si un ave se relaciona con este mundo es el cuervo más allá de lechuzas o águilas -que también tienen un importante significado-.
Espiritualmente es el que porta esa comunicación que une lo divino con lo terrenal, el que sirve de nexo de unión y comunicación. Es el animal totémico por excelencia con un alto contenido espiritual como se puede comprobar.
Que se le haya relacionado con la muerte no quiere decir que su mensaje sea siempre de fatalidad, todo lo contrario, también puede ser positivo y representa la capacidad que se tiene de transformación, así como las oportunidades que surgen y que deben ser aprovechadas.
Es la perspectiva a un nivel superior de todo aquello que nos rodea, siendo el significado espiritual del cuervo el aviso de la llegada de un guía espiritual, el símbolo de la superación, de ganar a la adversidad y superar los obstáculos en la vida.