Significado Espiritual de Ratones en Casa

Hay personas a las que les produce espanto y repulsión, otras, por el contrario, los tienen de mascotas y, sea como fuere, son animales simpáticos que esconden muchos significados.

Nos da muchos mensajes el significado espiritual de tener ratones en casa y todos ellos son tremendamente positivos, pues nos hablan de energías y abundancia, del trabajo infatigable y de la inteligencia que se tiene.

Es también sinónimo de fertilidad, de todo aquello que va entroncado a la fecundidad, aunque tiene una vertiente que nos alerta de la avaricia que se puede tener, así como de codiciar los bienes de los demás.

Todo ello es de lo que nos avisa este simpático animal, aunque también es una llamada a la reflexión, a estar en la situación de detenerse a pensar en todo lo que sucede alrededor tuya y también hacer hincapié en todo lo que estamos descuidando.

También invitan los ratones en casa a la renovación espiritual, a la limpieza del alma y todo aquello que lleve luz a la vida de la persona.

Es importante este aspecto pues, de otra forma, no se alcanzará esa elevación espiritual que es necesaria para seguir avanzando, para seguir evolucionando en la vida.

También tiene un segundo significado que es importante y que es que la persona debe actuar con precaución, con cuidado, no debe alejarse del camino correcto actuando por impulso o tomando decisiones poco meditadas, poco maduradas.

Se debe actuar siempre con cautela máxime en aquellas ocasiones en las que la persona está ante una situación nueva o con personas nuevas.

Como consejo siempre es escuchar más que hablar, no dejarse llevar por las primeras impresiones, no actuar en caliente o ante provocaciones que pueden, realmente, ser un señuelo para ponernos a prueba.

Qué significa tener ratones en casa

Igualmente, dentro de su significado espiritual encontramos las traiciones, que es otra de las alertas que se ponen de manifiesto con la presencia de los ratones.

Estos animales tienen ese mensaje que llevarle a la persona y que debe tener cuidado con aquellos que le rodean pues puede haber, puede existir, el riesgo de una traición que puede venir.

Te evitarás disgustos. También puede ser que un amigo te traicione, que desvela algo que no quieres que se sepa o que pierdas la confianza en él/ella por sus acciones.

También puede ser sinónimo de infidelidad, de una deslealtad por parte de tu pareja y que debes cuidar -aunque este último caso como más extremo e improbable-.

El significado espiritual de los ratones en casa es siempre positivo pues sirve de alerta y pone en guardia a la persona, ayuda a que no sea confiada.

Es un roedor que aparece en la Biblia, aunque se les trata como impuros pues siempre estaba allá donde había comida o eran sinónimo de plagas. Aunque, independientemente de todo ello, es un animal que evoca el trabajo y la labor infatigable.

En el hinduismo es el equivalente de la inteligencia animal, de las habilidades que tiene la persona y que pueden estar por explotar o que aun no han dado su máxima expresión y que se deben desarrollar.

Siempre es llamativo ver a un ratón comportarse, está siempre alerta, siempre atento, inquieto y buscando opciones para salir o buscar un refugio. Es la actitud espiritual, aquella que se desvela y quiere la siempre necesaria protección.

El significado espiritual de ver muchos ratones es la fertilidad que viene y la abundancia, son momentos en los que hay mucha prosperidad y se debe aprovechar todo ello sin olvidar el día de mañana.

También es la iluminación, el desarrollo personal y el avance, el crecer interiormente y tener una mayor pureza de alma.

Estos animales son hoy tenidos por mascotas y, en otros ámbitos como incómodos huéspedes, sea como fuere lo que lanza es un mensaje de atención, de cautela, de no descuidar aquellos aspectos de la vida que ahora están «en el aire», de limpiar el alma y buscar la iluminación.

Expresa el equilibrio que se debe tener y salir de las contradicciones y comportamientos erróneos. Son los cambios que han llegado o van a llegar y saber esperar las oportunidades realmente buenas.