Es un insecto que se considera simpático y que atrae la atención de todos aquellos que lo ven, siendo normal verla en los jardines de casi todo el mundo, teniendo un significado espiritual que llama la atención.
La mariquita destaca por su dorso vistoso, rojos con motas, lunares negros y tonos amarillos con naranja, es un caparazón de protección de sus alas que no debe engañarnos, pues también es un elemento de protección ante los depredadores que tiene.
Normalmente usa una técnica muy inteligente y es hacerse la muerta ante el depredador y segrega una especie de líquido sanguinolento por las patas que despide un olor que aleja a los atacantes.
Con su gran inteligencia el significado espiritual de encontrar una mariquita le habla a la persona que la ve que debe usar más su cabeza. Si muy pasional desde dejar los sentimientos a un lado y centrarse en actuar pensando las cosas.
Igualmente nos encontramos que lanza un mensaje de protección en la que alerta a la persona, llama a tener cuidado, a que se proteja a las personas más vulnerables que tenemos cercanas como pueden ser ancianos o niños e, incluso, a las mascotas.
Es el instinto de protección, así como de protegernos de comentarios, críticas, amistades falsas o personas que son celosas y/o envidiosas.
De esta forma nos encontramos que hay que estar atentos a todo lo que está en nuestra vida y tratar de detectar si alguien tiene algún problema que está ocultando o callando.
La mariquita también nos habla de la autoestima, de tener que vigilarla, así como de las ideas creativas que pone en funcionamiento, avisándonos que hay mucho potencial que puedes estar desaprovechando.
Significa espiritualmente la mariquita a la sabiduría y la protección, aunque se la vea pequeña e insignificante esconde una vida y también todo lo que hace por sobrevivir.
También es la capacidad de regeneración que tiene la persona, así como todo aquello que implica la «rehabilitación» del alma, curar las heridas emocionales que se pueden tener o de todo aquello que ha podido generar dolor.
Si la mariquita que vemos tiene el caparazón de color naranja es la curación en función del segundo de los chakras, es la vitalidad y una señal muy positiva.
Si es amarilla o naranja significa amor y pasión, es sinónimo de curación de las heridas emocionales que se tengan, de todo aquello que en el terreno de los sentimientos le ha podido hacer daño y que ya va cicatrizando. El consejo es que se haga desde el sano olvido, sin rencores.
Significado espiritual de ver una mariquita roja
Es la transformación y la regeneración, se considera que es un insecto que pasa por diferentes estados de vida y que es igual al despertar de la consciencia de la persona.
Se puede decir que la mariquita roja es la evaluación y el avance siempre sin freno, sin dejar de intentar aquello que se quiere, siendo el crecimiento espiritual e interior, que también puede cuidar a través de la meditación o la reflexión, del yoga, el Reiki o el Taichí.
Cuando se ve una mariquita también es sinónimo de buena suerte, de fortuna y de prosperidad pues, en el mundo de la agricultura, en el campo, los agricultores, al ver una mariquita sabían que iba a haber buena cosecha, que era tiempo de bonanza y de abundancia, de prosperidad.
Las marquitas además son, espiritualmente, la riqueza y eso es algo que conlleva alegría y felicidad.
Un dato poco conocido es que el número de la mariquita, al que se asocia, es el siete y este implica buena suerte, buen augurio, buenas noticias y apartar todo lo negativo.
Para muchos es el número de la buena suerte pero también es el equivalente al número de chakras, al equilibrio y la armonía así como a las oportunidades que llegan a la vida de la persona que la ve.
Otro significado espiritual de la mariquita es el de la gracia, según las creencias religiosas nos dice que el poder de la oración hace que las vibraciones positivas lleguen a la persona y que le pongan en armonía con el entorno.
Dentro de la cultura cristina está asociada a la Virgen María y a su nombre, representa el color de la sangre que derramó Jesús de Nazaret y tiene una alta consideración dentro de lo que es el cristianismo.
En Japón es buena suerte y se asocia al camino que lleva al cielo. En China, espiritualmente, son los poderes superiores, la riqueza y los buenos presagios. En el hinduismo es un regalo de Dios y en el budismo es la sensibilidad.
En casa o en la oficina, en el trabajo, es sinónimo de buena suerte y de positividad. Su la ves volando son los deseos que se cumplirán y la transformación interior.
Cuando se posa sobre ti es el amor que llama a tu puerta o la felicidad en la pareja, alcanzar aquello que se desea.
Si está muerta es que hay que decidir sobre una cuestión importante y en función de su color puede ser amarilla que es la felicidad, marrón que es la salud financiera, el verde que es la fertilidad, así como el naranja o roja que tiene los significados expuestos y que son positivos.
Es el significado espiritual que tiene la mariquita y que le hacen ser un insecto que es mensajera de la prosperidad y de la buena suerte. Por ello, si te has encontrado alguna estás de enhorabuena.