Probablemente tengas el temor a que una racha de mala suerte en la que nada de lo que haces te sale bien sea uno de los síntomas de la brujería que te hayan hecho.
El motivo de tu actual situación bien podría ser casualidad o que sencillamente no estás haciendo las cosas bien, pero también cabe la posibilidad que alguien que no te quiere bien te haya realizado un maleficio.
Aquí te voy a explicar cómo saber si te han hecho brujería o magia negra, cuáles son sus síntomas, y en el caso que creas que tienen un trabajo encima cómo poder quitarlo.
¿Cómo se sabe si somos víctimas de la brujería?
Para descubrir si hay un trabajo de magia o brujería en torno a nuestra persona debemos buscar los síntomas que se manifiestan y que si lo padecemos es posible que estemos siendo embrujados.
Estos pueden ir desde grados menores (como el “mal de ojo”) hasta de un grado mayor con diferentes variantes y gravedad.
Ante todo lo primero que debemos tener es tranquilidad y no caer en engaños de otras personas que te digan que te van a realizar un ritual para sacarte la brujería que te han hecho.
Como mejor consejo que se puede dar para no caer en todo lo que son los hechizos es el no creer en él, de esta forma nos protegemos mentalmente de ello.
Síntomas de que te han hecho magia negra
Hay una serie de orientaciones que nos pueden dar una idea de si estamos siendo parte de un maleficio de magia negra de estas características y si hemos sido “trabajados” o no:
- Se sufre de bloqueos mentales, aunque se pongan todos los medios y esfuerzos para resolver un problema.
- Pensamientos negativos con mucha frecuencia.
- Pesadillas constantes.
- Marcas en el cuerpo que aparecen sin ningún tipo de explicación natural, como moratones, arañazos o quemaduras.
- Peleas y disputas con la familia, amigos o pareja sin una razón aparente, con comportamientos o maneras de actuar totalmente anormales y poco habituales.
- Sensación de no estar solo, de sentirse observado o perseguido.
- Preocupaciones constantes, siempre se está muy tenso, no hay momentos para relajarse y es imposible llevar una vida normal o una existencia feliz.
Si se dan todos o algunos de estos síntomas no tiene que significar que nos hayan hecho brujería o madia negra, ya que es habitual que muchas personas tengan esos pensamientos sin necesidad de estar bajo ningún hechizo.
Por tanto, es muy complicado saber los verdaderos síntomas de la magia negra porque estos pueden variar de una persona a otra y de las diferentes circunstancias que rodean a cada uno de nosotros.
Se puede dar el caso que no tengamos ninguno de estos síntomas y en cambio si nos hayan hecho brujería o magia negra, siendo este el motivo de nuestra pesadumbre o que las cosas no nos vayan bien.
Lo más recomendable es buscar la forma de protegernos, aunque no nos hayan hecho magia negra, ya que así evitaremos las malas energías y tendremos ayuda para superar los momentos difíciles.
Una de las mejores maneras de acabar con el estado que te ha hecho sospechar que te hayan hecho brujería es realizarte una limpieza que ti misma puedes realizar en tu casa.
No es necesario acudir a ninguna bruja, ni pagar nada para poderte realizar un baño o ritual que aleje las malas vibraciones que tu alrededor y te permita ir avanzando en la dirección que tu deseas.
Puedes hacerte un baño con ruda y romero tal y solo gastarte el dinero en comprar las dos hierbas indicadas.
La clave en todo está en no creer, si no creemos en este tipo de situaciones, de hechizos, de acciones de brujería o de magia, estaremos totalmente a salvo de ello, no creer es la base de todo y es la mejor protección.
Si hay algo poderoso dentro del ser humano es su capacidad para sugestionarse y creer que la superchería es la causante de todos sus males.
Cómo evitar y quitar las maldiciones y la brujería
Lo mejor es no pensar en que alguien nos haya hecho una brujería de magia negra para que nos venga la mala suerte y las cosas nos vayan mal en la vida.
Pero si a pesar de eso sentimos algunos de los síntomas descritos anteriormente debemos de hacernos la limpieza energética y tener nuestros amuletos de protección para cortar esas intenciones hacia nosotros.
Principalmente quienes lo hacen son motivados por la envidia y que desean lo que nosotros tenemos, aunque en realidad también tenemos nuestros problemas, puesto que el ser humano es así.
La envidia es uno de los mayores males que nos afectan y es lo que propicia que se encarguen trabajos de magia o brujería contra nosotros. Pero tranquilos, te proteges, te limpias, y sobre todo deja de pensar en ello.