Es un mineral que está dotado de una inusual belleza, aunque su apariencia inicial podría ser confundida con el cuarzo, pero lo cierto es que es bien diferente y también tiene un significado y poder mágico que lo hace muy útil.
La selenita destaca por su blancura casi transparente, un tipo de «cristal» que tiene una acción benefactora en la persona pues lo que dota a la misma de de paz, pero en un sentido muy profundo.
Ayuda a limpiar las energías y las malas vibraciones, esto hace que sea un «agente limpiador» y que también, según la tradición oriental, active lo que son los chakras que encontramos en la corona así como en corona superior. Esto es importante pues la acción que realiza es mucho mayor que las que hacen otras gemas de su tipo.
La selenita también se le llama «piedra de la luna» -no confundir con la «piedra luna»-, la etimología nos lleva, precisamente a su nombre, pues fue así como la bautizó Johan G. Wallerius, haciendo una especie de analogía con lo que él llamaba como «yeso transparente».
Pero la selenita además tiene la propiedad mágica de emanar luz, blanca, muy poderosa, que hace que también resulte especialmente resplandeciente y que tiene un metafórico reflejo plateado.
Propiedades mágicas de la selenita
Siempre será fuente de tranquilidad, de sosiego, de calma, y si es una persona particularmente nerviosa lo mejor es que tenga siempre una selenita en el bolsillo.
En su vertiente mágica ayuda siempre en el amor y también en la fertilidad, su relación con la luna, con Selene, la pone de manifiesto en este sentido pues ayuda a la persona que la porta.
Si es una mujer y está embarazada la selenita le dará calma y estabilidad, la ayudará en ese momento de la maternidad y limpiará su energía para dar una vida con mucha pureza.
En un sentido más profundo dentro de la alta magia se usa para ayudar a aquellas almas que padecen, que tienen mayor sufrimiento y que han abandonado ya el mundo de los vivos. Es una ayuda a ese tránsito importante que se tiene y que es, de alguna forma, el siguiente paso en la evolución de esa alma.
Es un mineral la selenita que, además, facilita la comprensión de los sentimientos, de aquello que se lleva dentro, de las emociones e, incluso, de la empatía que se debe tener en ese sentido con los demás.
Cuando quieres un ambiente que esté purificado, limpio, con poner algunas de estas piedras en el mismo lograrás ese efecto deseado evitando todo lo que es negativo y puede hacer que la persona tenga esa mala energía.
En «decoración» interior resulta ideal para evitar la negatividad y si se coloca en los rincones de una casa, habitación en concreto u oficina también da su protección.
Es un buen remedio para que, por la noche, los niños duerman sin temor y sea un elemento de protección, sin miedo a la oscuridad.
Además la selenita captura la luz de la luna, si se pone en una ventana, terraza o zona de la casa donde les de la luz de nuestro satélite se logrará que se carguen y que tengan su poder siendo muy benefactora para el lugar donde se encuentre.
Este tipo de mineral también es un elemento muy positivo para las personas que son tímidas, pues las hace desenvolverse mejor con los demás, menos cortedad, más conversación y un poco más desinhibidas/os.
Amuleto de protección
Hay muchos amuletos que están realizados con selenita, desde colgantes, pulseras, péndulos y otros objetos que son igualmente importantes, pues no sólo son adornos si no que también son agentes protectores.
Hacen que la conciencia sea clara, el espíritu se mantenga limpio, puro; además elimina las malas energías acumuladas por la persona y hace que haya una mayor limpieza del cuerpo en sus diferentes niveles de vibración.
Como piedra que esté relacionada con la luna hace que las propiedades mágicas de la selenita potencien el terreno sentimental, pues elimina los bloqueos en este sentido y calma los celos, la confusión. Estabiliza a la persona y hace que esa desconfianza que puede haber en toda relación de pareja se apacigüe y se piense en positivo; ayuda a tomar decisiones y a ser más flexible.
En otros aspectos sirve para que el cuerpo llamado «emocional» tenga una mayor capacidad de tolerancia y siempre sea objetiva/o en la relación de pareja más allá de impulsos irreflexivos que puede motivar la imaginación y la desconfianza.
La selenita es un buen mineral que tienen una buena cantidad de propiedades mágicas que benefician a la persona que la porta y que, de forma abierta, no duda en utilizarla.