El intrigante sonido submarino del «Bloop» se escucha en Cádiz

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Con la libertad de movilidad entre provincias y el levantamiento parcial de las restricciones debido a la pandemia del Covid-19 son muchas las personas que salen a la calle o, en verano, gustan de disfrutar de un fin de semana en la playa siendo la provincia de Cádiz uno de esos lugares de ensueño que se suele elegir y donde no pocos misterios se han dado y captado.

Si en otras ocasiones he hablado del sonido del «HUM» del que hablan los testigos -siempre según sus relatos- ahora nos sorprende otro sonido que tiene un enigma y se desconoce su origen, se trata del «Bloop».

Hay que decir que el «Bloop» es un sonido, perteneciente a la gama de los «ultrasonidos» subacuáticos que se detecta, por primera vez, por la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos) y que resultó muy sorprendente. No se había escuchado antes y durante el tiempo que se investigó planteó un buen número de interrogantes. Hay que tener en cuenta que desconocemos más del 80% de lo que nos oculta los mares y océanos del mundo, así su origen es tan incierto como misterioso.

Fue en 1997 cuando uno de los micrófonos submarinos que se colocaron en el Pacífico Sur registró -según la NOAA- un «sonido extraño, poderoso y extremadamente fuerte», así los hidrófonos (micrófonos subacuáticos) que se distancian los unos de los otros por más de 3200 kilómetros. La NOAA indicó sobre el «Bloop» «no se parecía a nada que hubieran escuchado antes, no solo era fuerte, el sonido tenía una característica única que llegó a conocerse como el Bloop».

¿Explicaciones?

Así el sonido se investigó a conciencia ya que se temía que pudiera tratarse del eco de un ingenio militar de una potencia extranjera y eso es algo que los Estados Unidos no suele contemplar dentro de su permeabilidad de seguridad. Christopher Fox, responsable del Proyecto de Monitoreo Acústico de la NOAA en el Laboratorio Ambiental Marino del Pacífico en Newport indicó de su extrañeza ante el mismo y que no se pudo determinar su naturaleza.

Se estimó que podía ser un calamar gigante pero el sonido no podía ser ese que se detectó; igualmente se descartó que fuera una ballena, según la opinión de Phil Lobel, biólogo marino de la Universidad de Boston.

Otras opiniones decían que el «Bloop» se registró a 1760 kilómetros de una ciudad hundida/perdida (sin demostrase su existencia) de R’yleh, evidentemente hablar de esta ciudad es como hablar de la Atlántida, no deja de ser un mito sin mayor demostración.

Otra hipótesis de trabajo más seria fue la que dio la NOAA en 2012: el agrietamiento de una plataforma de hielo al romperse desde la Antártida. En el informe de dice: «El Bloop fue el sonido de un terremoto de hielo, un iceberg que se rompía y se desprendía de un glaciar antártico. Con el calentamiento global, ocurren más y más terremotos anualmente, que rompen los glaciares, se agrietan y finalmente se derriten en el océano».

Sobre esto el sismólogo de la Universidad Estatal de Oregón, Robert Dziak, decía: «las características de frecuencia y duración de la señal Bloop son consistentes, y esencialmente idénticas, a las señales de terremotos que hemos registrado en la Antártida». Además se decía que «el sonido de Bloop que se solía reproducir estaba a 16 veces su velocidad normal, lo que podría dar a entender que es un sonido biológico. El sonido original es más parecido al de un terremoto. Consistentes con los terremotos de hielo generados por grandes icebergs cuando se agrietan y fracturan». Para concluir con todo ello se dijo que «lo más probable es que el iceberg o los icebergs que generaron el Bloop estuvieran entre el estrecho de Bransfield y el mar de Ross, o posiblemente en el cabo Adare, una fuente bien conocida de señales criogénicas». Pero lo cierto es que se cuestiona mucho ese argumento que se contempla, simplemente, como una explicación convincente «para callar bocas».

El «Bloop» en Conil, en Cádiz

Todo esto sirve de explicación para relatar lo ocurrido en Conil el pasado fin de semana donde una pareja, pese al tiempo, decidieron estar en la playa. Cuando llevaban un buen rato optaron por tomar un baño: «no era el mejor día pero ya que decidimos pasar el día en la playa irnos sin darnos un baño era un pecado. Nuria y yo fuimos al agua, que estaba fría pero buena cuando pasaba un rato, y estuvimos nadando y jugando a echarnos una pelota. En un momento dado, cuando metí la cabeza en el agua sentí un sonido como martilleando mi oído, era como un «boom» o «blom», una cosa tremenda. Se lo dije a Nuria y que metió la cabeza en el agua y también lo escuchó. Entonces nos quedamos mirándonos y pensamos que podía ser un animal, como se habló de un delfín en la Bahía y eso. A Nuria le dio miedo y quiso salirse del agua. Había más gente en la playa y otro chico nos dijo que él también lo había escuchado, lo que no sabemos es el origen aunque parecía venir del agua, de dentro, por que fuera no se escuchaba pero cuando te metías la cabeza era como un sonido muy intenso» relataba Antonio Manuel.

Otras personas, a decir de sus palabras, escucharon el sonido aunque la indeterminación del mismo lo hacen ser un misterio o, por el contrario, podría tener una explicación que, de momento, nadie ha indicado pese a las consultas oficiales realizadas.

¿Qué es el «Bloop»? Nadie lo sabe -hasta el momento-, especulaciones hay muchas pero realidades muy pocas. Puede ser desde una de las causas oficiales expuestas hasta algo de origen enigmático que no sabemos explicar y que se ha manifestado, en esta ocasión, en Cádiz, en nuestro litoral, dentro de nuestras aguas e igual que ocurre con el «Hum» nos encontramos que podrá ser tomado más o menos en serio, con más o menos guasa andaluza, gaditana, pero su realidad, por los testimonios, es innegable. Toca buscar explicaciones allá donde, en muchas ocasiones, se antojan como imposibles.