Fenómenos paranormales en la ‘casa del doctor’

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Hay casas que, sin saber cómo quedan encantadas, cualquier evento en su interior ha podido ser el desencadenante, ha podido ser la «espoleta» que lo destape y que haga que lo imposible se manifieste para terror de todos los que viven allí, es lo que sucede en Navalmoral de la Mata , en Cáceres, en Extremadura, y que sobrecoge conocer su historia.

Es el investigador Gonzalo Pérez Sarró el que habla de todo ello y referencia de un caso espectacular. Él investigó todo este apasionante caso donde se escuchaban ruidos extraños y fuertes porrazos en una casa que era muy grande, de tres plantas con el ático, o desven, habilitado como vivienda.

La «Casa del Doctor» era llamada así por el otorrinolaringólogo Francisco Izquierdo Asensi, que tuvo la tragedia de haber muerto prematuramente, con tan sólo 39 años, en  el año 1968, siendo muy querido pues era especialista en operar amigdalitis que provocaban fiebres y preocupación y era visto como un experto en tales intervenciones.

El «señor de la cartera»

Cuando llega la muerte de alguien siempre es un suceso impactante y puede dejar vestigio de su presencia en lo que fue su hogar. Allí, en «la casa del doctor» se veía a un señor o una sombra al que llamaron «el señor de la cartera» pues portaba  una especie de cartera o maletín.

Además los fenómenos paranormales tenían su ámbito de actuación en las tres plantas y eran diferentes en cada una de ellas, todas tenían un especial tipología en como se manifestaban esos fenómenos insólitos pero lo básico, es estereotipo era ver una sombra y «al hombre de la cartera» o del «sombrero», en lo que es un arquetipo en las apariciones.

Otras experiencias la tuvieron una familia con cinco hijos que habita el desván, ellos decían que escuchaban pasos en la escalera de madera, niños jugando y el cerrojo de la puerta (que era grande) que se abría solo. La familia Pereiro lo vivió en silencio, la propietaria de la casa, en cierta ocasión, mientras estaba planchando, pudo ver a un hombre con un sombrero, para asombro y perplejidad. Pese a saber lo que ocurría en su interior aguantaron allí 25 años, el no tener «posibles económicos» imposibilitaba una mudanza.

Más hechos extraños

En estas experiencias se tiene la de un hijo que notaba como lo tocaban estando en su cama y, en otra ocasión, vieron al ser en varias ocasiones, además de ver por un ventanal, que comunicaba dos habitaciones, a un brazo sin cuerpo, un brazo fantasma, un brazo espectral.

Aquella visión los llenó de terror y dio muestras de esos fenómenos que se manifestaban en la casa. Gonzalo Perez Sarró narra como en sus investigaciones fue partícipe de otras muchas apariciones que se produjeron ante la familia o miembros de la misma.

Otra familia vivió en la planta baja desde 1986 por un espacio de 10 años, la casa parecía tocada por un «halo» maléfico pues el padre enfermó y murió al poco tiempo; vivieron muchos fenómenos extraños y era la planta baja donde centralizaban los hechos extraños donde se veía a ese «señor del sombrero», escuchaban murmullos, voces, conversaciones susurradas, la hija del matrimonio vivía todo con especial intensidad, notaba cómo la tocaban o tiraban de la sábana, todo muy impresionante

La misma chica es testigo de lo imposible cuando mira en el espejo tras una noche plácida -en la que no pasó nada-, estando ante el espejo nota como tiene en el abdomen unos moratones y grandes arañazos, como hecho por un objeto o «algo» tipo garra grande.

La chica tenia la sensación que allí había pasado algo raro, que había una historia extraña con un bebé, según Gonzalo Pérez Sarró incluso creía que estaba  ese «algo» al otro lado de la pared.

Los hijos del doctor, en cierta ocasión, estaban jugando y vieron esa sombra pues estaban en una zona donde se comunicaba comedor y pasillo, era «el hombre de la cartera». Les dejó impresionados y escucharon como se abrió la puerta del desván y se cerró de golpe. Fueron a ver, pusieron la cabeza pegando la oreja a la puerta y no escucharon ruido tras la misma, al abrir no había nada pero si arañazos marcados en la madera. ¿Cómo era posible?

Son los fenómenos extraños en la llamada «Casa del Doctor» en Navalmoral de la Mata, una casa encantada donde la realidad supera a la ficción.