Otra final. Y van… pues 8 en nueve jornadas. El Cádiz CF está obligado a ganar por fin su primer partido en casa. Lo tiene que hacer ante un Málaga que viene en un momento plácido, con la inercia de su ascenso y prácticamente disfrutando de una regreso a segunda situado en media tabla.
Para los de Paco López es el típico partido de poco que ganar y mucho que perder. Porque perder metería a los amarillos en zonas más que preocupantes de la clasificación, pero ganar sería, poco menos, que hacer lo que tiene que hacer.
Una derrota esta tarde convertiría al Cádiz en el peor Cádiz como local de la historia. Casi nada. Y con todas las urgencias, temores, fantasmas y nervios de un equipo recién descendido y una entidad en estado de convulsión desde el verano. Los síntomas de descomposición que mostró el equipo en Huesca la última jornada no son más que el reflejo de las señalas que se perciben desde la entidad.
Paco López parece que recuperará a un hombre importante para su sistema y sus ideas: Fede San Emeterio. El cántabro podría entrar en el mediocentro para aportar ese equilibrio perdido en los últimos compromisos. En el once, pocos cambios más parece que habrá.
Fali está disponible y podría formar en el eje de la zaga junto a Víctor Chust y Alejo podría tener una nueva oportunidad en el titular, aunque queda la duda de si el mister cadista le apostará por Carlos Fernández para formar claramente ese 4-3-3 que parece tanto le gusta.
El choque podría verse condicionado también por el estado del terreno de juego. Habrá que ver cómo responde el césped del Nuevo Mirandilla a las lluvias previstas para toda la jornada, en la que Cádiz está en alerta amarilla por precipitaciones. Aún así, parece que durante el tiempo del partido las precipitaciones pararán, o al menos bajarán en intensidad. Pero lo caído antes dependerá del drenaje del Mirandilla si afecta o no al juego.
El Málaga CF llega a Cádiz en un estado de placidez y con una respuesta social histórica. Además, es un choque que en la capital de la Costa del Sol sigue recordando aquella promoción de permanencia, y se coge con más ganas aún, si cabe.
Igual que especialmente motivado parece que estar Dioni, el ex cadista que vive una segunda juventud en Málaga, donde es el segundo máximo goleador en este buen arranque liguero. En el bando cadista, una situación similar vivirá Ontiveros, que se mide al equipo en el que se formó.