El juicio por la expulsión de Quique Pina del Estadio Nuevo Mirandilla durante un Cádiz CF-Real Sociedad del pasado mes de diciembre ha sido aplazado finalmente este mañana hasta que la jueza resuelva un recurso presentado por el Cádiz CF.
El murciano denunció tras su expulsión al presidente del Cádiz, Manuel Vizcaíno, y al directo de Seguridad del club por coacción, y el proceso ha desembocado en esta vista que se iuba a celebrar hoy en los juzgados de San José de Cádiz. Así, Vizcaíno y Pina iban a volverse a ver las caras, algo que de momento tendrá que esperar.
Fuentes de la acusación señalan a este medio que el presidente del Cádiz ha presentado un recurso alegando que no expulsó a Pina, algo que tendrá que ser resuelto por la magistrada. Hasta que no se produzca este avance, no se podrá volver a fijar fecha para la celebración.
Este juicio iba a llegar pocas semanas después de un duro cruce de declaraciones entre ambos que inició Pina en una rueda de prensa que ofreció tras confirmarse el descenso del Cádiz CF a segunda división. En aquella comparecencia hizo públicas algunas acciones realizadas al frente del Cádiz por el propio Vizcaíno y su vicepresidente, Rafael Contreras, a los que acusó de manera más o menos directa de usar al Cádiz para lucrarse. Vizcaíno le respondió con un duro comunicado en el que aseguró que Pina no regresaría al Cádiz y que estudiaría emprender acciones legales.
En este contexto de tranquilidad entre ambos (notese el intento de ironía), llega este juicio. Según fuentes cercanas a este caso, hay citados a declarar como testigos algunos de los agentes de la Policía Nacional que intervinieron en aquella situación. Pina interpuso aquella misma tarde una denuncia por estos hechos que serán juzgados este lunes.
En aquella denuncia que presentó en la Comisaría de la Policía Nacional de Cádiz Cádiz, Quique Pina, que se presentó como uno de los máximos accionistas del Cádiz CF, explicaba que accedió al estadio junto a sus hijos con unas invitaciones no nominativas. A los pocos minutos, siempre según la versión de Pina, el director de Seguridad de la entidad cadista les indicó que debían abandonar el palco en el que se encontraban, ya que estaban ocupando un lugar que no les correspondía.
En el escrito el ex consejero delegado del club amarilla añadía que el representante del Cádiz CF se dirigió a ellos “de malas maneras, sin aparente motivo y sin ofrecer explicaciones”. Al abandonar el campo, proeseguía en este relato, Quique Pina intentó comprar nuevas entradas para poder presenciar el partido, siendo interpelado por otro trabajador de seguridad de la entidad para que abandonara el estadio ya que “tenían órdenes del club y no le iban a dejar entrar al campo”. Por ello, el murciano afirmó en aquella denuncia sentirse “coaccionado” tras ser obligado a abandonar finalmente el Nuevo Mirandilla junto a sus hijos. Hoy se verá ese caso.
En aquell momento, desde el club, por su parte, se aclaró que los asientos de los palcos deben ser nominales, aunque la invitación que da acceso al recinto deportivo no lo sea, y en este caso las localidades que Pina y sus hijos pretendían ocupar estaban asignadas a un representante del fútbol árabe que había sido invitado a presenciar el partido entre el Cádiz y la Real Sociedad. Por ello dichos asientos no podían ser ocupados por el socio accionista de Locos por el Balón.
