Mañana, 26 de octubre a las 17:00, se inaugurará unnuevo Centro de Día en Cádiz: Mi ángel de la guarda en la Barriada de la Paz. Este centro, creado por tres mujeres sanitarias de trayectoria ejemplar, abre sus puertas con la misión de ofrecer cuidados avanzados y personalizados a las personas mayores.
Detrás de esta iniciativa se encuentran sus dos creadoras, Cristina Rodríguez Sánchez (44 años), Estefanía Vega Álvarez (38 años), junto a su mano derecha, la directora de Enfermería Rosa María Soto Lobón (54 años), que han impulsado el proyecto como respuesta al aislamiento social y las necesidades de apoyo físico y emocional que la pandemia de COVID-19 dejó en el colectivo de mayores.
«Somos sanitarias», explica Cristina Rodríguez, “y después de todo lo que pasó con el COVID-19, sentimos la necesidad de hacer algo más por las personas mayores, algo para brindarles un espacio de apoyo y compañía, para ayudarles a frenar el deterioro cognitivo y físico que muchas veces se acelera cuando están solos”. En un proceso que reconocen como «difícil» y que comenzó hace años, las tres mujeres lograron superar los siempre liosos proceso burocráticos y económicos para establecer un servicio integral y de calidad.
El centro ofrecerá 25 plazas y proporcionará una serie de servicios destinados a mejorar la calidad de vida de las personas usuarias. “Nuestra idea es dar algo más que los servicios mínimos que establece la Junta”, explica Rosa María Soto, directora de Enfermería del centro. La oferta incluirá un servicio de enfermería a precio reducido, pensado para aquellos mayores que no pueden costearse atención privada. Este servicio esencial será complementado por terapias ocupacionales, psicología y actividades recreativas, todo diseñado para preservar la independencia y estimular las capacidades cognitivas y físicas de los usuarios.
Uno de los servicios novedosos para un centro de día que ofrecerán será el de lavado a las personas mayores. “Muchas veces ni ellas ni sus familias pueden hacerlo en algunos momentos, y creemos que es algo a lo que deben poder tener acceso”. Para ello, el centro está adaptado para personas con movilidad reducida, y disponen de una silla geriátrica especial y una ducha adaptada para aquellas personas mayores que no puedan asearse en sus propios hogares.
“Estos servicios son fundamentales para ofrecer calidad de vida y dignidad en el último tramo de sus vidas”, sostiene Rosa María. A estos se suman servicios de podología y peluquería, que resultan a menudo inalcanzables para muchas personas mayores, y un espacio cultural con libros y actividades para mantener viva la memoria y los conocimientos de la gente de Cádiz. «Queremos que este centro sea un lugar donde aprender, recordar y crear buenos momentos», comparte Estefanía Vega.
Esfuerzo y colaboración
El camino hacia la apertura de Mi ángel de la guardia no ha sido fácil. “Conseguir la financiación fue un reto”, indica Cristina. Al comienzo, las emprendedoras recurrieron a un microcrédito y a la Línea 2 de ayudas para mujeres autónomas. También han contado con el apoyo del Instituto de Fomento, Empleo y Formación (IFEF), la Junta de Andalucía y el Área de Asuntos Sociales, quienes las han asesorado en los requisitos necesarios para poner en marcha el proyecto. A pesar de las complejidades burocráticas, el centro ya cuenta con su número de registro, un paso crucial para que el centro pueda ofrecer sus servicios con las garantías oficiales.
Desde que comenzó a sonar su aperturá, el centro ha empezado a recibir solicitudes de personas interesadas y a gestionar peticiones de personas que quieren acogerse a sus servicios. La necesidad de servicios de atención diurna y cuidados especializados se ha visto acelerada por los efectos de la pandemia, que dejó a muchas personas mayores en Cádiz solas, con familias viviendo lejos y sin el apoyo diario que tanto necesitan.
“Hay mucha demanda de este tipo de servicios”, señala Estefanía Vega. “Muchos mayores no cuentan con la ayuda de sus familias en el día a día, y otros simplemente necesitan un espacio adecuado donde se les pueda atender en sus necesidades básicas y donde puedan disfrutar de un ambiente cálido y de calidad”. Para responder a esta demanda, las fundadoras planean concertar algunas plazas para facilitar el acceso a más personas, aunque aún están a la espera de completar el proceso con la Junta de Andalucía.
Programación completa
A partir del 4 de noviembre, Mi ángel de la guardia estará a operativo de forma oficial en Avenida de la Bahía número 7 , abriendo sus puertas a los mayores de Cádiz de lunes a viernes, de 9:00 a 17:00. Los horarios se han fijado para atender la jornada completa de media pensión, de modo que los usuarios puedan aprovechar el día completo. Además de los servicios básicos de cuidado, el centro incluirá gimnasia adaptada y contará con un transporte especializado para aquellos mayores que no puedan desplazarse fácilmente hasta el centro.
El centro ha sido diseñado y equipado para asegurar que cualquier persona mayor, independientemente de sus capacidades físicas o limitaciones económicas, pueda recibir los cuidados que necesita para mantenerse activa y disfrutar de su día a día.