Un hombre de 56 años de edad identificado como C.G.P. y con domicilio en Barcelona ha sido detenido en la madrugada de este martes por la Policía Local de Cádiz, acusado de un presunto delito de atentado a los agentes de la autoridad.
Los hechos se produjeron en torno a las 1.30 horas de la pasada madrugada, cuando dos agentes de la Policía Local patrullaban realizando vigilancia de la zona comercial por la Calle Nueva, esquina con la Calle San Francisco, en prevención de posibles robos por la zona.
En ese momento, los efectivos policiales fueron increpados e insultados por el detenido. Cuando procedieron a solicitarle su identificación, el hombre reaccionó de forma muy agresiva, golpeando con patadas, puñetazos y mordiscos a ambos policías. Los agentes resultaron lesionados a causa de este ataque, necesitando atención médica posteriormente.
Finalmente el varón fue reducido por los agentes y durante el traslado a las dependencias policiales mantuvo la misma actitud agresiva, causando daños materiales en el vehículo policial.
Cabe recordar que hace apenas unos días agentes de la Policía Local tuvieron que intervenir también en un caso de violencia de género, que acabó con la detención de un varón de 54 años en el barrio de la Viña.
Los efectivos policiales acudieron a la plaza Manolo Santander, antigua plaza de la Reina, tras recibir aviso en la central de comunicaciones de que un hombre estaba agrediendo a una mujer en plena calle. Al llegar al lugar de los hechos, los agentes contactaron con un grupo de cinco mujeres que declararon haber visto a un individuo propinándole puñetazos en la espalda y en los brazos a una mujer que parecía ser su pareja, puesto que ambos vivían en la misma calle.
Al ser interrogado por los agentes el detenido negó la agresión, reconociendo tan sólo que había discutido con la mujer, su pareja desde hace unos seis meses. La víctima, sin embargo, reconoció a los agentes que el hombre le había agredido e insultado, y que no era la primera vez que sucedía, pero que en principio no quería presentar denuncia por miedo a posibles represalias. Finalmente la mujer, de 60 años, accedió a ser trasladada a un centro sanitario y posteriormente a la Comisaría de la Policía Nacional para presentar la correspondiente denuncia.