El Ayuntamiento de Cádiz sigue adelante en la recuperación del nombre Carranza para el estadio municipal

El Consistorio inicia el expediente y justifica su decisión alegando que el nombre Carranza está desvinculado de su connotación franquista y solo apela “a la memoria colectiva del cadismo“

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Antiguo rótulo que lucía en el estadio gaditano. Ahora quedaría solo Estadio Carranza.

El Ayuntamiento de Cádiz no ha duda y sigue adelante con el proceso para el re-cambio en el nombre del Estadio Nuevo Mirandilla que pasaría a llamarse Estadio Carranza, sin la referencia al Ramón para despersonalizar y “hacer referencia a la memoria colectiva del cadismo” y considera el Consistorio, cumple la Ley de Memoria Democrática.

Con este argumento, el equipo de Gobierno de Bruno Garcia (que hoy no ha dado la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno como es habitual) considera que se cumpliría con la normativa, pese a las voces alertando de lo contrario que se han oído desde que el Ayuntamiento anunció el pasado sábado 27 de julio que nombraría Estadio Carranza a la instalación municipal.

Así, la junta de Gobierno local de este 2 de agosto ha aprobado al inicio del expediente que busca cambiar el nombre del estadio municipal de Nuevo Mirandilla a Estadio Carranza, como estaba prácticamente cantado, con la ausencia del alcalde, Bruno García, para evitar que se pueda manchar su imagen de moderación con este proceso. Era la primera vez que alguna de las partes impulsoras de este cambio, Consistorio y Cádiz CF, comparecían tras el anuncio. Y ha sido el primer teniente de alcalde, José Manuel Cossi, y responsable del área de Memoria Democrática el que ha tenido que explicar la decisión.

Cossi explicó que, según el criterio del Ayuntamiento, el nombre “Estadio Carranza”, desligado de la figura completa de Ramón de Carranza al suprimir el nombre de pila, puede ser utilizado porque “honra nada más que la identidad y la memoria colectiva del cadismo”. Argumentó que este enfoque es coherente con la normativa vigente, ya que el nombre, tal como se propone ahora, “trasciende a nivel mucho más allá de todo lo que se refleja respecto a su nombre anterior”.

No obstante, esta decisión ha generado controversia, ya que muchos consideran que mantener el nombre “Carranza” sigue vinculando el estadio a la figura de Ramón de Carranza, un alcalde franquista. La Ley de Memoria Histórica establece que se deben eliminar del espacio público todas las referencias a figuras ligadas al régimen de Franco, y para muchos, el Ayuntamiento está buscando una interpretación flexible de esta normativa.

El Cádiz CF ha jugado un papel crucial en este proceso, proponiendo el cambio de nombre y colaborando estrechamente con el consistorio. Según Cossi, “básicamente damos curso a esa petición del Cádiz Club de Fútbol cumpliendo con los procedimientos administrativos”. Esta estrecha colaboración ha levantado críticas, ya que el Ayuntamiento parece haberse escudado en la solicitud del club para justificar un cambio que afecta a un bien público.

Cossi también se refirió al proceso administrativo que seguirá esta iniciativa, señalando que se ha solicitado al club la “cesión parcial de la marca Trofeo Carranza”, propiedad del Cádiz CF, para que el Ayuntamiento pueda operar sobre esta denominación. Subrayó que esta cesión “no conlleva ninguna contraprestación económica” y que la relación con el club se basa únicamente en términos administrativos.

En cuanto al informe técnico necesario para continuar con el proceso, Cossi aseguró que “el procedimiento administrativo es el mismo” que se siguió en 2021, cuando un funcionario municipal dictaminó que el nombre “Carranza” no era compatible con la Ley de Memoria Histórica. Funcionario que, señala Cossi, es el encargado de firmar el informe en esta ocasión. Sin embargo, ahora, el Ayuntamiento parece decidido a reinterpretar el informe para permitir la continuidad del nombre bajo la premisa de que se ha desvinculado de su origen franquista.

A pesar de las críticas, Cossi defendió la gestión del equipo de Gobierno, rechazando las acusaciones de que esta medida sea una “cortina de humo” para desviar la atención de otros problemas municipales. Según el edil, “la gestión sigue día a día, nosotros seguimos funcionando”, y esta decisión se enmarca en el contexto de responder a “una importante mayoría de la ciudad” que apoya la propuesta del Cádiz CF.

La aprobación del expediente es solo el primer paso de un proceso que deberá superar diversas etapas legales y administrativas antes de que el cambio de nombre se haga efectivo. No obstante, la decisión del Ayuntamiento de Cádiz ha suscitado un debate intenso sobre el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y la influencia de entidades privadas en la gestión de elementos públicos.

Desde los partidos de la oposición a la Asociación de Memoria Histórica alertan que el nombre Estadio Carranza sigue sin cumplir la ley y critican la decisión municipal.