El reciente informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la población en España ha puesto de manifiesto un dato sorprendente: el tremendo dato de densidad de población de Cádiz capital y también el de una de las comarcas gaditanas. Y eso, pese a la pérdida de población de Cádiz.
Esta elevada densidad de población no oculta una realidad preocupante: la población de la capital no deja de disminuir, una tendencia que lleva décadas y que amenaza con debilitar aún más económica y socialmente a la capital.
Y es que el dato de Cádiz triplica la densidad de población de la segunda localidad de la provincia en este dato y multiplica por 25 el de la media provincial. Con 9.017 habitantes por kilómetro cuadrado, Cádiz sigue siendo la localidad más densamente poblada de la provincia de Cádiz y una de las más compactas de toda España. Este dato, sin embargo, esconde una paradoja: la densidad de población ha caído en la última década debido a la pérdida constante de habitantes, una tendencia que afecta a la capital desde hace más de 40 años.
En 2019, la densidad era de 9.433 habitantes por kilómetro cuadrado, cuando la población de la ciudad alcanzaba los 116.027 habitantes. Ahora, en 2024, con 110.914 habitantes, Cádiz ha reducido su densidad a 9.017 hab/km², lo que refleja la continuada migración de población joven hacia otras localidades y la imposibilidad de atraer nuevos residentes debido a problemas estructurales como la falta de suelo urbanizable y los elevados precios de la vivienda.
Este mapa interactivo muestra cómo Cádiz se posiciona muy por encima del resto en densidad de población, destacando la diferencia con San Fernando, La Línea y Algeciras. Pincha en el término municipal para ver toda la info.
Cádiz triplica en densidad a la segunda de la provincia
El caso de Cádiz capital resulta aún más significativo al compararse con otras localidades de la provincia y con los datos generales. La densidad media provincial es de 168,7 habitantes por kilómetro cuadrado en un territorio de 7.434 km², muy lejos de los 9.017 hab/km² de la capital.
Comparativamente, Cádiz triplica la densidad de San Fernando, que ocupa el segundo lugar con 3.055 habitantes por kilómetro cuadrado.
Le siguen en el ranking:
- La Línea: 2.406 hab/km²
- Algeciras: 1.420 hab/km²
- San Roque: 864 hab/km²
Todas estas localidades pertenecen a dos comarcas clave de la provincia: la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar, dos áreas que concentran la mayor parte de la población provincial y que destacan por su desarrollo urbano, industrial y económico.
La falta de suelo en Cádiz: una barrera para frenar el éxodo
Uno de los factores clave que explican esta caída en la población y en la densidad de Cádiz capital es la falta de suelo urbanizable. La geografía de la ciudad, rodeada por el mar y con una superficie de apenas 12,3 kilómetros cuadrados, limita cualquier expansión urbanística. Cádiz está prácticamente colmatada, sin espacio para nuevas construcciones, lo que ha llevado a una subida constante de los precios de la vivienda.
Este fenómeno, unido a la escasez de oportunidades laborales y habitacionales asequibles, está provocando un éxodo de población joven hacia localidades cercanas, como Chiclana, El Puerto o San Fernando. Estas localidades ofrecen, desde hace décadas, mayor disponibilidad de suelo, viviendas más asequibles y, en muchos casos, una mejor calidad de vida para familias jóvenes.
Este gráfico de carrera de barras refleja cómo Cádiz ha ido perdiendo protagonismo a lo largo de las décadas, mientras localidades como Jerez y Algeciras han crecido considerablemente.
Con este horizonte, el proyecto de Zona Franca en los terrenos de Navalips para la creación de un nuevo espacio residencial y empresarial en Cádiz aparece como una pequeña tabla de salvación en el horizonte. Esta actuación permitiría prácticamente la creación de un nuevo barrio, con viviendas y servicios que aliviarían la presión demográfica y económica de la ciudad.
Distribución de la densidad y la población por comarcas
El análisis de densidad de población también revela un desequilibrio entre las comarcas de la provincia. Las zonas más densas se concentran en la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar, mientras que las áreas rurales, como la Sierra de Cádiz o La Janda, registran densidades muy bajas.
La Bahía de Cádiz es la comarca con mayor densidad, alcanzando 752,94 habitantes por kilómetro cuadrado, muy por encima de la media provincial de 168,7 hab/km². Esto se debe a la alta concentración poblacional en municipios como Cádiz, San Fernando, Chiclana y El Puerto.Le sigue la Costa Noroeste, con 350,21 hab/km², gracias a localidades como Rota y Chipiona, que combinan núcleos urbanos compactos con áreas turísticas.
Esta distribución de densidad, tiene este reflejo en cuanto al número de habitantes que aglutina cada comarca. La Bahía de Cádiz es la más poblada, con 446.308 habitantes (35,6% del total provincial) seguida de nuevo del Campo de Gibraltar, con 271.525 habitantes (21,6%) y esta vez de la Campiña de Jerez.
Las localidades menos densas: la otra cara de la provincia
En contraste con Cádiz y sus problemas de saturación, las localidades rurales presentan densidades de población extremadamente bajas. Los municipios menos habitados de la provincia son:
Estas localidades, ubicadas principalmente en la Sierra de Cádiz, sufren problemas estructurales de despoblación, envejecimiento y falta de oportunidades económicas.
Cádiz capital se mantiene como la localidad con mayor densidad de población de la provincia, triplicando a San Fernando y multiplicando por más de 53 veces la media provincial, que es de 168,7 hab/km².
Sin embargo, esta cifra disminuye año tras año debido a la constante pérdida de habitantes. La falta de suelo urbanizable y los altos precios de la vivienda siguen expulsando a la población joven hacia municipios cercanos más asequibles, como Chiclana y El Puerto.
A su vez, la concentración de población en las comarcas de la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar contrasta con la baja densidad de las localidades rurales, especialmente en la Sierra de Cádiz.
El reto para Cádiz y su provincia pasa por equilibrar su crecimiento demográfico y económico, con políticas urbanísticas que permitan el desarrollo de viviendas asequibles, proyectos como Navalips que generen nuevos espacios en la capital, y una revitalización de las zonas rurales que frene su despoblación.