El apellido Carranza y su presencia en instalaciones públicas de Cádiz van a estar en el centro del debate político y social en la ciudad, si es que alguna vez no lo ha estado. Mientras el Gobierno central evalúa la posibilidad de cambiar el nombre del Puente José León de Carranza, hoy la Diputación de Cádiz se ha opuesto a recuperar el nombre Estadio Carranza para el estadio municipal Nuevo Mirandilla.
La polémica la reactivó el Ayuntamiento de Cádiz, cuando en julio de 2024, el equipo de Gobierno y el Cádiz CF anunciaron la apertura de un procedimiento administrativo para recuperar el nombre de Estadio Carranza.
El inicio de este expediente, aún no cerrado, fue criticado por diferentes organizaciones, como la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Cádiz y la plataforma Carranza Incumple, que aportaron documentación y testimonios históricos para fundamentar la improcedencia de dicha reversión.
Hoy, el Pleno de Diputación se ha opuesto a este cambio y a que el estadio de la capital lleve el nombre (o apellido, como se especifica en la propuesta) de un golpista, como parece más que demostrado que fue Ramón de Carranza. Ahí parece que ha estado el salvavidas al que se ha agarrado el PP: que no se pongan nombres de golpistas, ya que, como ha señalado el concejal de Memoria Democrática y diputado provincial, José Manuel Cossi, la propuesta municipal es la de poner en valor la marca Estadio Carranza.
La moción, presentada por Izquierda Unida, ha sido aprobada con 16 votos a favor (PSOE, IU Cádiz y uno de La Línea 100×100) frente a 15 abstenciones (PP y otro diputado de La Línea 100×100).
El portavoz de IU, Ramón Galán, recordó durante su intervención en el pleno la figura de Ramón de Carranza y Fernández Reguera, a quien definió como un “alcalde golpista”. Galán ha recordado que Carranza participó activamente en la gestación del golpe de Estado de 1936 y fue nombrado alcalde de Cádiz por el general Gonzalo Queipo de Llano. En sus palabras: “Durante el segundo semestre de ese año, la represión en Cádiz fue especialmente cruenta. El alcalde legítimo, Manuel de la Pinta, de tan solo 31 años, fue fusilado en los fosos de Puerta de Tierra, al igual que muchos gaditanos más”.
El portavoz enfatizó que mantener el nombre de “Carranza” en el estadio municipal supondría ignorar esta historia y contravenir la legislación vigente, como el artículo 35 de la Ley de Memoria Histórica. Galán concluyó que “ensalzar figuras como la de Ramón de Carranza es incompatible con una sociedad que busca consolidar los valores democráticos”.
El respaldo socialista
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Cádiz y también diputado provincial, Óscar Torres, reafirmó el posicionamiento en contra del cambio de nombre. Torres subrayó que “el renombramiento del estadio incumpliría claramente tanto la ley estatal como la ley autonómica de Memoria Democrática”. Además, aportó datos adicionales sobre el pasado de Carranza, quien, según afirmó, “mandó depurar al entonces alcalde democrático, Manuel de la Pinta, junto a 22 concejales y centenares de gaditanos”.
Torres calificó la propuesta de devolver el nombre como una “decisión política” que no debía contar con el respaldo de las instituciones. “Hablamos de un edificio de titularidad municipal, propiedad de los gaditanos, no de una entidad privada. Esta corporación no puede ser cómplice de un homenaje a quien estuvo al frente de una etapa tan oscura”, sentenció.
Óscar Torres cerró su intervención subrayando la incompatibilidad entre los valores democráticos y el homenaje implícito en devolver el nombre de Carranza al estadio municipal. Para ello, citó unas palabras pronunciadas por Ramón de Carranza durante su mandato como alcalde en el contexto de la represión franquista: “Espero que esta sea una diputación modelo, pues yo como gobernador y como alcalde de Cádiz daré ejemplo, donde no dejaré más que a los funcionarios buenos, y espero que se haga lo mismo aquí, esta depuración en la Diputación de Cádiz“. Torres afirmó que esta frase evidencia la naturaleza represiva de su figura, reforzando la necesidad de no recuperar su nombre en espacios públicos.
La postura del PP y el debate sobre la marca
Por su parte, José Manuel Cossi, concejal de Memoria Democrática de Cádiz y diputado provincial del PP, defendió la abstención de su grupo. Según Cossi, la figura de Ramón de Carranza “claramente no se ajusta a los criterios de la Ley de Memoria Democrática”. Sin embargo, justificó el procedimiento administrativo impulsado por el Cádiz Club de Fútbol como una respuesta a las demandas de parte de la afición y de la ciudad, que veían en “Carranza” una marca comercial.
El edil también destacó los esfuerzos realizados tanto por la Diputación como por el Ayuntamiento en materia de Memoria Democrática, incluyendo un reciente encuentro provincial sobre el tema y la creación de una cátedra en colaboración con la Universidad de Cádiz. “Nuestra posición no pone en duda el cumplimiento de la ley, pero creemos necesario dar respuesta legal a estas consultas”, explicó.
Finalmente, la moción salió adelante con los votos a favor de PSOE, IU y uno de La Línea 100×100. Este resultado refuerza el compromiso de la Diputación con la Ley de Memoria Democrática y envía un mensaje claro al Ayuntamiento de Cádiz, instándolo a archivar el expediente para renombrar el estadio.
