La Junta de Andalucía, a través de la Delegación del Gobierno en Cádiz, ha respondido a la reciente denuncia presentada por la Federación Local de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Flampa) de Cádiz, defendiendo la calidad y supervisión de los menús que se sirven en los comedores escolares públicos de la región.
La denuncia de Flampa expone hasta 14 categorías de incumplimientos contractuales por parte de la empresa Servei D’Apats, del Grupo Mediterránea, que gestiona el servicio de comedor en 12 colegios públicos de Cádiz. Entre los principales problemas señalados por Flampa se encuentran la insuficiente cantidad y la baja calidad de la comida servida, el elevado rechazo de los platos por parte del alumnado y el incumplimiento de ratios de cuidadores.
En respuesta, la Junta de Andalucía ha afirmado que “los menús escolares siguen todas las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y de la Consejería de Salud y Consumo en cuanto a alimentación saludable.” Estos menús promueven “una alimentación completa y equilibrada,” destacando “la presencia diaria de verdura y fruta fresca,” el “uso de aceite de oliva virgen extra,” una “mayor proporción de pescado que de carne magra,” la “limitación de alimentos precocinados y fritos,” y la “apuesta por la dieta mediterránea y los productos ecológicos.”
Además, la Junta asegura que “los menús son supervisados mensualmente por técnicos del Plan de Evaluación de la oferta alimentaria en comedores escolares andaluces (EVACOLE),” quienes comprueban “su adecuación a los criterios nutricionales y de calidad establecidos.” Estas verificaciones se realizan tanto en los centros educativos como mediante auditorías de la Agencia Pública Andaluza de Educación.
En los pliegos de contratación del servicio de comedor escolar, se establecen de forma estricta y detallada “los parámetros para la confección de las comidas,” que son de “obligado cumplimiento por parte de las empresas adjudicatarias.” La Junta subraya que “cualquier problema comunicado en el servicio de comedor es atendido de inmediato,” mediante visitas de técnicos o inspecciones de EVACOLE. En caso de desviaciones, se aplican “las penalizaciones oportunas”, que pueden llegar hasta “la resolución de los contratos si se evidencian incumplimientos graves”.
La defensa de la Junta se produce en un contexto de creciente preocupación por la calidad de los servicios de comedor escolar en Cádiz, un asunto que ha generado un intenso debate entre las familias y las autoridades educativas. La resolución de esta disputa dependerá de las investigaciones y decisiones que tomen la APAE y la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo en respuesta a la denuncia de Flampa.