La sección sindical de UGT ha lanzado una crítica directa y contundente a la gestión del actual alcalde de Cádiz a través de un comunicado titulado “El dato mata al relato”. Este documento expone las serias deficiencias en la administración pública municipal, subrayando la creciente precarización laboral que afecta a los trabajadores del Ayuntamiento, en particular a aquellos que se desempeñan en los Servicios Sociales.
El sindicato comienza su denuncia aludiendo a las promesas incumplidas del alcalde, quien, según UGT, ha utilizado la gestión de la Ayuda a Domicilio como una bandera política para erigirse como el “Alcalde más social”, pero cuya actuación no ha ido más allá de las palabras.
UGT aplaude el “interés desmesurado, y faraónico que el Alcalde demuestra con las Auxiliares de Ayuda a Domicilio”, reconociendo la importancia de este servicio para la población más vulnerable. Sin embargo, la realidad detrás de esta aparente preocupación social es muy distinta.
El sindicato pone el foco en la carencia de personal en el área de Servicios Sociales, donde “existen 20 puestos vacantes, además de muchos otros repartidos por todo el Ayuntamiento”. Esta falta de personal especializado no solo está generando un sobreesfuerzo insostenible entre los empleados actuales, sino que también pone en peligro la prestación de servicios esenciales como la Ayuda a Domicilio.
Según UGT, sin técnicos municipales suficientes, “el servicio de atención a domicilio no se presta”, ya que son estos profesionales quienes tienen “la competencia y la potestad de prescribirlo, supervisarlo”. La situación es tan crítica que, de no cubrirse estos puestos, las auxiliares podrían verse obligadas a “cruzarse de brazos”, incapaces de atender a las personas que dependen de este servicio.
Este escenario revela una contradicción evidente entre el discurso del alcalde y la realidad en la que operan los Servicios Sociales. UGT expresa su decepción por la falta de acción del alcalde, quien se comprometió a cubrir estos puestos el 1 de agosto, una promesa que ha quedado incumplida. La incapacidad de gestionar adecuadamente el personal necesario para que la Ayuda a Domicilio funcione eficientemente es, según UGT, un síntoma del “desastre” en el que se ha convertido la administración municipal.
Precarización de la Administración
Otro de los puntos críticos señalados por UGT es la reciente modificación “parcial” de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), aprobada en el último pleno municipal. El sindicato es tajante al afirmar que esta modificación es insuficiente para resolver los problemas estructurales que enfrenta el Ayuntamiento. “De nada le servirá esa modificación de RPT parcial”, advierte UGT, si el Ayuntamiento no cuenta con los recursos humanos necesarios para cubrir los puestos. La crítica se extiende a la aparente inconsistencia en las políticas del actual equipo de gobierno, recordando que el Partido Popular, durante los ocho años de mandato del anterior alcalde José María González, Kichi, votó sistemáticamente en contra de modificaciones similares.
UGT señala que la precarización de la administración local no es una consecuencia de la estabilización de interinos, sino de una gestión que ha permitido que las condiciones laborales en el Ayuntamiento se deterioren. El sindicato denuncia que es “más fácil entrar en cualquier empresa privada que le trabaje al Ayuntamiento sin pasar por procesos selectivos de mérito, igualdad y capacidad que tanto gustan a los habilitados, que opositar, formar parte de una bolsa, estar en situación de ser llamado”. Esta afirmación subraya la falta de oportunidades y la burocracia que enfrentan aquellos que desean acceder a un empleo público en condiciones justas y transparentes.
“Gobernar Cádiz ‘puertas pa fuera’“
En su comunicado, UGT también acusa al alcalde de estar más centrado en las apariencias externas que en resolver los problemas internos del Ayuntamiento. Según el sindicato, el alcalde está más preocupado por “gobernar Cádiz ‘puertas pa fuera’“, es decir, en proyectar una imagen de gestión eficiente hacia el exterior, mientras que en el interior del consistorio reina el caos y la desorganización. UGT sostiene que “todo lo que se mueve en el Ayuntamiento, bueno mejor dicho que ‘no se mueva nada’, tiene otra cabeza responsable”, sugiriendo que las verdaderas decisiones no se toman en el propio Ayuntamiento, sino que están influidas por otros intereses.
Esta crítica refuerza la idea de que el alcalde ha fallado en su responsabilidad de garantizar un funcionamiento adecuado de la administración municipal, lo que está llevando a la plantilla a un estado de agotamiento y desmoralización. La denuncia de UGT es clara: el Ayuntamiento de Cádiz está sufriendo una crisis de gestión que afecta tanto a los trabajadores como a los servicios que estos deben prestar a la ciudadanía.
