Los soportales y las escaleras que conectan la calle doctores Meléndez con la plaza Capuchinos, uno de los santuarios del Carnaval callejero durante la semana de fiesta en la ciudad, se han convertido también el resto del año en un punto negro, según denuncian vecinos del barrio de la Viña. Alertan de marginalidad, drogas y peleas conviven a diario con las familias de la zona, acostumbradas ya a sufrir el intolerable comportamiento del reducido grupo de individuos que allí pernoctan y pasan buena parte del día.
Eugenio Belgrano, líder de la formación Ahora Cádiz, publicó en sus redes sociales un vídeo que denuncia el peligroso ambiente que se vive en esta zona del barrio, con varias personas implicadas en una pelea. Una denuncia que ha llegado también hasta la televisión nacional, pues vecinos de la zona han comparecido ante las cámaras del programa Ahora Sonsoles de Antena 3 para exponer su situación.
El reportaje pone el foco en un grupo de personas que “han tomado el barrio de la Viña”, atemorizando a los vecinos con drogas, suciedad, peleas constantes… Incluso hacen sus necesidades “en plena vía pública y a la luz del día”. La Policía acude cuando los habituales conflictos suben de tono, pero este grupo de personas siempre acaban volviendo a un rincón que han hecho suyo en pleno corazón del barrio viñero.
Los vecinos han dado la cara en televisión para denunciar su situación y reclamar soluciones. Alejandro, uno de ellos, ha reconocido que “nos tienen atemorizados, sentimos miedo. Lo único que queremos es vivir en paz. Mi hijo de 11 años me dice que no quiere pasar por aquí, que prefiere dar la vuelta”. Antonio, por su parte, ha explicado que “el otro día encontré una jeringuilla y la Policía me dijo que no podía hacer nada, que a los que fuman les dicen que se vayan a la playa a hacerlo”.
Augusta, por su parte, ha asegurado que “cuando llevo a mi nieto al parque subo asustada. Hay peleas, siempre están igual. Se ponen a hacer sus necesidades delante de los niños y encima hay que callarse. Ayer vinieron unos cuantos coches patrulla, vienen, se van y al rato otra vez lo mismo”. De igual manera se expresa otra de las vecinas, que habla de “broncas, trapicheo de drogas… Y si les dices algo encima se encaran contigo”.
Los vecinos reclaman una solución tras años sufriendo esta situación y sintiendo miedo en su propio barrio cada vez que salen a la calle. Por el momento ni la Policía ni el Ayuntamiento han podido dar con una medida efectiva que pueda poner fin al calvario de muchos gaditanos y gaditanas que han visto como la suciedad, la marginalidad y las peleas han pasado a formar parte de su día a día.