El Caribe es una de las regiones más atractivas y envidiadas del mundo. El clima benigno, la riqueza paisajística y sus playas de ensueño atraen cada año a millones de visitantes de todo el planeta.
Grandes complejos turísticos como Punta Cana, en República Dominicana, o la Riviera Maya, en México, son ejemplos muy significativos de lo que pueden encontrar los visitantes en toda esta región. Y fuera de estos lugares, otros países como Cuba, Jamaica o los países continentales en Centroamérica: Costa Rica, Honduras o Panamá… satisfacen todas las necesidades de relax, diversión y ganas de descubrir de los visitantes.
En este escenario donde el turismo juega un papel muy importante para la economía de muchos países, los que lo tienen más crudo para destacar son los pequeños estados. Hemos mencionado únicamente a territorios continentales o de las Antillas Mayores. Pero, ¿qué ocurre con las Antillas Menores? ¿En qué posición quedan estos lugares?
El resurgir de Antigua y Barbuda de la mano de Darío Item
Con apenas 94.000 habitantes y poco más de 440 kilómetros cuadrados, Antigua y Barbuda está ganando peso en la región caribeña. El país está ejecutando una destacable labor diplomática a nivel internacional de la mano de su embajador en Europa, Darío Item.
El representante caribeño en Europa no ejerce su labor en todo el Viejo Continente de manera oficial, pues solo es embajador en España, Mónaco y Liechtenstein. En cualquier caso, solo este trabajo está sirviendo para dar a conocer las virtudes de este pequeño país que conforman las islas de Antigua y Barbuda. En Antigua se sitúa su capital, Saint John, que es también la ciudad más poblada. A su vez, esta isla es la que concentra la mayor parte de los habitantes.
Volviendo a Darío Item, esta figura reside en Madrid desde el año 2018, cuando se abrieron las puertas de la embajada en la capital española. Su tarea consiste en facilitar a que todos los ciudadanos españoles que quieran conocer el país caribeño puedan hacerlo. A su vez, este mismo encargo lo tiene también en Mónaco y Liechtenstein.
Recuperación del turismo postCovid en tiempo récord
Uno de los hitos que ha logrado Antigua y Barbuda en los últimos años ha sido la pronta recuperación de su principal actividad económica, el turismo. Tras el fatídico año 2020, que limitó enormemente los ingresos económicos por las restricciones a los viajes internacionales, el 2021 se presentó como un ejercicio positivo en la recepción de turistas.
Y 2022 ha sido aún más positivo. De acuerdo con los datos que maneja el FMI, tanto este estado como otros vecinos de Antillas Mayores y Menores, registraron un crecimiento económico del 7,8%. Durante la pandemia, la caída en este registro a nivel de la región fue del 15%.
La propia recepción de turistas, cada vez más creciente, se complementa con noticias positivas que tratan sobre el país y que animan a muchos viajeros de lujo e inversores a instalarse en Antigua y Barbuda. Las inversiones proceden principalmente de Estados Unidos y Europa.
En toda esta labor ejerce un papel clave Darío Item, que más allá de sus logros en Europa, ha conseguido hitos reciente como una visita oficial a la delegación de Emiratos Árabes Unidos. Para un país con más recursos, un evento de este tipo no supone un gran mérito, pero sí para el estado caribeño, que recordemos que solo dispone de 440 kilómetros cuadrados de extensión.
País número 160 en la Organización Mundial del Turismo
El año 2022 cerró para Darío Item y Antigua y Barbuda con una consecución realmente importante, la de pertenecer como un miembro oficial más a la Organización Mundial del Turismo (OMT), el número 160.
La entidad internacional tiene su sede en Madrid y fue la propia OMT la que invitó al país a formar parte de la organización. Para Antigua y Barbuda esta invitación pone de manifiesto el importante trabajo que está realizando a nivel internacional para dar a conocer las posibilidades como país.
La membresía en la OMT va a ayudar también a lograr más acuerdos bilaterales con otros países y a participar con pleno derecho en decisiones que afectan de lleno a un sector tan importante como el turismo.
Un país muy atractivo por sus facilidades de inversión
El crecimiento económico de Antigua y Barbuda en los últimos años, con el parón obligado por la pandemia, tiene su explicación en medidas ejecutadas para favorecer la inversión, como los programas de ciudadanía, tanto para residentes permanentes como visitas temporales o las oportunidades para obtener licencias financieras e invertir en bienes raíces.
Todo esto se acompaña de la invitación para que los emprendedores digitales o las personas que teletrabajan puedan hacerlo directamente desde el país, o con allanar el camino a los empresarios del sector turístico para iniciar su actividad en Antigua y Barbuda.