Cuando hablamos de la L-Arginina estamos haciendo referencia a un aminoácido esencial que se obtiene sintetizando la prolina y la glutamina. Además, es un complemento que, a lo largo de los últimos años, ha comenzado a estar muy presente entre aquellos dedicados a la práctica de diferentes actividades deportivas.
Según los estudios realizados, la L-Arginina podría tener diversos efectos beneficiosos para nuestro organismo, como la disminución de la presión sanguínea o una mejora notable en la eficiencia energética, lo que la convertiría en un elemento muy útil a la hora de practicar determinados deportes, especialmente los de resistencia.
No obstante, son muchas más personas las que pueden beneficiarse de algunas de sus características principales, tal como vamos a ver a continuación.
Beneficios incluso fuera del deporte
Como aminoácido sintetizable por el cuerpo que complementa diversas funciones de carácter metabólico, es lógico que la L-Arginina se pueda encontrar como complemento alimenticio. Y, aunque son muchos los deportistas que recurren a ella, sus propiedades son el motivo por el que su utilidad va más allá del ámbito deportivo.
Después de todo, puede disminuir los niveles de glucosa en sangre, lo que beneficia a pacientes con diabetes tipo 2, pero también aumenta la sensibilidad a la insulina.
Asimismo, ha demostrado tener una efectividad bastante interesante a la hora de mejorar las capacidades físicas de pacientes con problemas de corazón, hipertensión o angina de pecho, ya que mejora el flujo sanguíneo e incrementa el consumo de oxígeno.
Los deportes de resistencia, grandes beneficiados
Como era de esperar, los efectos vasodilatadores de la L-Arginina permitirían una mejora sustancial en la eficiencia energética del organismo y el aumento del tiempo transcurrido hasta el agotamiento, lo que favorece directamente a todos aquellos deportes donde la resistencia juega un papel crucial.
Asimismo, la L-Arginina tiene efectos como la síntesis de creatina, urea y diversas proteínas, pero su catabolismo también produce óxido nítrico y citrulina. Y este óxido nítrico, precisamente, afectará a los procesos de reposo y tendrá efectos localizados en el músculo esquelético.
Otras propiedades de la L-Arginina
La gente que practica deportes puede beneficiarse de diversos efectos que ofrece la L-Arginina, como la reducción de grasa en el cuerpo o el hecho de que facilite la recuperación tras un esfuerzo intenso, ya que elimina el amoniaco muscular.
No obstante, existen razones de peso por las que tomar L-Arginina aunque no practiquemos deporte. Después de todo, contribuye al aumento de protección ofrecida por nuestro sistema inmunológico, algo interesante, especialmente, en los meses más fríos del año. También ayuda a cicatrizar heridas y, según se ha demostrado, contribuye a reducir el colesterol. Por último, cabe señalar que facilita el desarrollo muscular gracias a que estimula la secreción de la hormona responsable del crecimiento.
La L-Arginina, pues, se ha convertido en el aminoácido de moda, y no sin razón. Sus numerosas propiedades hacen que introducir este elemento, a través de diversos complementos alimenticios, sea adecuado para todo tipo de perfiles.