La precariedad laboral sigue siendo uno de los principales problemas en España, como lo era hace una década, y como también lo fue en los años 90 del siglo pasado. Quienes cumplen dieciocho años y comienzan a buscar trabajo por primera vez se enfrentan al mismo panorama desolador de las generaciones que les precedieron: la tasa de desempleo más alta de Europa, unos salarios precarios, y unos precios del alquiler que aumentan sin cesar.
La solución ante este problema con frecuencia pasa por emigrar en busca de mejores pastos. Los salarios en Alemania superan fácilmente los 4000 €, el mercado del alquiler se encuentra mejor regulado, y las leyes laborales garantizan unas jornadas dignas en puestos de trabajo con todo tipo de beneficios. Además, ni siquiera necesitamos un visado, porque podemos trabajar sin problemas en cualquier país de la UE.
Tanto Alemania como otros países de Europa Central cuentan con un mayor número de trabajos en industrias que en España tienen una presencia muy limitada, como la industria automotriz o la farmacéutica. Por eso estos sectores son algunos de los más buscados por quienes completan sus estudios universitarios en España y quieren acceder a un puesto de trabajo que no los limite al ‘mileurismo’. Los más destacados son:
Farmacia – Sanofi, Roche, Novartis
La gran mayoría de los medicamentos que se distribuyen en España proviene de empresas farmacéuticas como Sanofi, Roche, Novartis o Bayer, entre muchas otras. Estas compañías diseñan todo tipo de medicinas, desde la aspirina de toda la vida hasta las dosis de L-Dopa que se utilizan para tratar el párkinson. Gracias a estos medicamentos, millones de personas pueden tener una vida mejor.
Quienes tienen estudios de Farmacia o de Química pueden conseguir trabajos diseñando medicamentos, monitoreando su producción mediante sistemas de valoración, analizando muestras de laboratorio para comprobar la eficacia de las medicinas, y desarrollando un sinfín de tareas similares. Se trata de trabajos realmente satisfactorios que tienen sueldos muy elevados y unas condiciones laborales de primer nivel mundial.
EVs – Tesla, Volkswagen, Renault
La fabricación de vehículos eléctricos cuenta con tres grandes jugadores en la escena global: China, Estados Unidos, y Europa. Sin embargo, no todos los países europeos están igual de involucrados. España hace mucho que renunció a su industria automotriz, y solo conserva fábricas gestionadas por compañías centroeuropeas a cambio de ciertos beneficios en la distribución de sus vehículos en el mercado español.
Los vehículos eléctricos se encuentran en el centro de uno de los sectores estratégicos más importantes de las próximas décadas, así que su fabricación está impulsada por la propia UE. El país que lleva la delantera es Alemania, que no solo puede presumir de su nueva gigafábrica de Tesla, sino que además es el hogar del grupo Volkswagen, Daimler Truck –propietaria de Mercedes– y BMW: tres de las compañías líderes en la producción de EVs en Europa.
Inversiones – Amundi, UBS, Deutsche Bank
España cuenta con un sector bancario muy robusto, pero es demasiado dependiente del mercado español y el latinoamericano. En España, la exposición del sector bancario al sector inmobiliario es mayúscula, de ahí que el precio de los alquileres y los hogares en venta se haya disparado en los últimos años –con algo de ayuda de AirBnB–. En cambio, en otros países de la UE las inversiones bancarias están más diversificadas y tienen un mayor alcance internacional.
Si tienes una buena formación financiera y dominas al menos el inglés y el castellano, puedes conseguir un gran puesto de trabajo en empresas de inversión con sede en los Países Bajos, Bélgica, Alemania, Dinamarca o Suiza. Con frecuencia estas empresas buscan especialistas de distintos mercados regionales, así que en tu caso podrías ofrecer tus conocimientos del mercado hispanohablante a cambio de un gran salario.
Energía – Iberdrola, EDF, Enel
Otra de las grandes empresas de nuestro país es Iberdrola, que además es uno de los principales líderes globales en una instalación de centrales eléctricas de energías renovables. Puede que consigas un buen trabajo en Iberdrola dentro de España, pero la mayor parte de sus instalaciones se llevan a cabo en diferentes países del globo, así que su mercado laboral es más extenso en otros países de la UE.
Tanto Iberdrola como EDF y otras empresas eléctricas europeas están invirtiendo fuertemente en las centrales eólicas ‘offshore’, con lo que el mar del Norte es una de sus principales áreas de trabajo. Además, países como Alemania están haciendo grandes esfuerzos para extender su producción de renovables y reducir su dependencia de las centrales de ciclo combinado o de gas, con lo que el trabajo está casi asegurado.
