Un equipo del Consorcio Provincial de Cádiz trabaja desde la mañana de este viernes 1 de noviembre en el devastador rescate del túnel de Alfafar-Benetússer, en Valencia. La dotación gaditana, compuesta en total por 24 personas, trabaja en este rescate junto a bomberos del parque de Fuengirola, que también se han desplazado a colaborar en estas labores.
Allí, el impacto de la última DANA ha dejado una escena desoladora: pràcticamente medio centenar de vehículos destrozados y vícticamas mortales atrapadas en su interior en un escenario que muchos describen como una de las mayores tragedias que han vivido.
El equipo gaditano partió a Valencia en la madrugada del jueves, movilizando veinticuatro efectivos procedentes de siete parques de bomberos de la provincia y del Grupo de Localización y Rescate (GLR), además de dos perros especializados en la búsqueda de personas. Tras un rápido despliegue de medios, el grupo de Cádiz se unió a las tareas de rescate en una de las zonas más afectadas por el temporal.
Desde la mañana de este viernes, han trabajado sin descanso en el túnel de Alfafar-Benetússer, donde se han encontrado con más de 40 vehículos atrapados, muchos de ellos con ocupantes que no lograron salir a tiempo del avance de las aguas.
Escenas desgarradoras
La situación dentro del túnel es dantesca. En cuestión de horas, el agua acumulada alcanzó hasta siete metros de altura, sumergiendo vehículos y atrapando a sus ocupantes. A medida que los bomberos avanzan en el achique de agua y el despeje del túnel, la magnitud de la tragedia se vuelve evidente: automóviles dañados, apilados unos sobre otros y volcados. Cada vehículo es una incógnita que exige atención, y cada hallazgo es un golpe para los equipos, que se están encontrando escenas que califican como las más duras de su carrera.
Uno de los bomberos desplazados desde Málaga describía el momento en que abrieron la puerta de un coche atrapado en el lodo: “Es una de las peores tragedias que hemos enfrentado; cada minuto en el túnel se hace eterno, y uno nunca sabe lo que va a encontrar”. Los trabajos continúan bajo condiciones difíciles, en medio de un silencio roto por el ruido de las bombas y los equipos de extracción, mientras el operativo intenta devolver algo de calma a las familias y comunidades devastadas por la tormenta.
La expedición gaditana está formada por cuatro bomberos del parque de Cádiz, tres de Chiclana, siete de Algeciras, dos de Jerez, dos de El Puerto, uno de Ubrique y otro de Villamartín. Este equipo ha viajado con ocho vehículos de rescate —incluyendo dos de rescate pesado y una embarcación— y está coordinado desde el parque de bomberos de Requena, en Valencia.