La revista Viajar ha destacado ha elaborado un mapa de las localidades más infravaloradas de cada provincia. En Cádiz destacan en esta aspecto a una localidad ubicada en el centro de la provincia, pero que es un destino de gran belleza natural, sino también como un enclave de alto valor histórico y cultural, con un patrimonio que abarca vestigios medievales, tradiciones centenarias y sabores que hablan de una identidad única.
¿Cuál dirías que es la localidad más infravalorada de la provincia de Cádiz? La revista parece tenerlo claro. Descubre cuál es.
La publicación Viajar ha elegido a Alcalá de los Gazules como el pueblo más infravalorado de la provincia de Cádiz, una afirmación que, para quienes conocen a fondo esta localidad, puede resultar cuestionable. Situado en pleno corazón del Parque Natural de los Alcornocales, Alcalá de los Gazules se presenta no solo como un destino de gran belleza natural, sino también como un enclave de alto valor histórico y cultural, con un patrimonio que abarca vestigios medievales, tradiciones centenarias y sabores que hablan de una identidad única.
Alcalá de los Gazules cuenta con una serie de monumentos y lugares de interés que parecen desconocidos a tener de esta elección. Entre los más destacados se encuentra la Torre del Homenaje del Castillo, que data de los siglos XI y XII. Este conjunto arquitectónico, situado en la cima del casco urbano, es un testimonio vivo de la influencia almohade que marcó la estructura urbana de la localidad.
La torre y el trazado urbano circundante se diseñaron estratégicamente para permitir a sus habitantes divisar las vastas fronteras naturales del entorno, lo que fue crucial durante los tiempos en que las tensiones entre musulmanes y cristianos estaban en su apogeo. Este legado árabe define gran parte del encanto de Alcalá y evoca la rica interacción cultural que caracteriza la historia de Andalucía.
A este patrimonio se suma la Parroquia de San Jorge Mártir, un edificio emblemático con más de 500 años de historia. Construida sobre los cimientos de una antigua mezquita, esta iglesia gótica es uno de los mejores ejemplos de arquitectura medieval en la región y, para muchos, un referente de la cultura cristiana en época medieval. Su altar mayor y las esculturas de imaginería que alberga son de una calidad notable, posicionando a la iglesia como un sitio de interés no solo religioso sino también artístico.
El Bronce de Lascuta
La historia de Alcalá de los Gazules se remonta aún más allá de la era medieval, como evidencia el Bronce de Lascuta, una pieza arqueológica del siglo II a.C., que constituye la inscripción latina más antigua hallada en la península ibérica. Este bronce, que se encuentra actualmente en el Museo del Louvre, simboliza el inicio de la historia escrita en Alcalá de los Gazules y es un vestigio del trasiego comercial que existía entre esta región y otros puntos clave del Mediterráneo. La presencia de esta pieza histórica destaca la importancia de Alcalá en las rutas comerciales y culturales de la antigüedad, demostrando que este pueblo siempre ha sido un cruce de caminos y un lugar de intercambio cultural.
Para los amantes de la naturaleza, Alcalá de los Gazules ofrece un entorno incomparable en el Parque Natural de los Alcornocales, uno de los bosques de alcornoques más importantes de Europa. Este parque, que rodea al municipio, es un lugar idóneo para realizar rutas de senderismo que exploran tanto la diversidad de la flora y fauna local como el legado histórico de la región.
Una de las rutas más recomendables es la Ruta de los Molinos, que permite descubrir antiguos molinos hidráulicos que en su día fueron esenciales para la economía local. Otra ruta destacada es la subida a El Picacho, desde donde los excursionistas pueden disfrutar de una de las vistas panorámicas más espectaculares del parque y sus alrededores. Estas rutas no solo proporcionan un contacto directo con la naturaleza, sino que también conectan a los visitantes con la historia agrícola e industrial de la zona.
A las afueras de la localidad, el Santuario de Nuestra Señora de los Santos se erige como un lugar de peregrinación y devoción que alberga una impresionante colección de exvotos declarada Bien de Interés Cultural (BIC). Este santuario es un punto de encuentro para los fieles y un espacio que respira historia y espiritualidad. Los exvotos, ofrendas que los devotos han dejado a lo largo de los siglos, son un testimonio de la devoción popular y una muestra del patrimonio religioso intangible de la región. Este santuario es no solo un espacio de recogimiento, sino también un símbolo de la identidad alcalaína.
La gastronomía de Alcalá de los Gazules es otro de los grandes atractivos de este pueblo gaditano. Entre los productos más destacados se encuentran el queso de cabra Payoya, una delicia artesanal elaborada con la leche de esta raza autóctona que se caracteriza por su sabor único y su textura suave. Otro manjar típico es el pan moreno, que forma parte esencial de la dieta local y acompaña a numerosos platos tradicionales.
En cuanto a platos típicos, el gazpacho caliente es un imprescindible que resume la esencia de la cocina andaluza: sencilla, sabrosa y enraizada en los productos de la tierra. Estos sabores, junto a otros guisos y platos de temporada, hacen que la gastronomía de Alcalá de los Gazules sea un reflejo de su historia y su entorno natural, y una razón más para visitar este enclave que muchos viajeros pasan por alto en favor de destinos más populares y masificados.
Pese a la consideración de Viajar de que Alcalá de los Gazules es un pueblo infravalorado en comparación con otras localidades de Cádiz como Tarifa, Jerez de la Frontera o la misma ciudad de Cádiz, quienes conocen bien la historia y el entorno de Alcalá discrepan. La riqueza patrimonial, cultural y natural de este pueblo lo convierten en un destino que merece reconocimiento y que ofrece una experiencia auténtica, lejos del bullicio de las localidades más turísticas. Alcalá de los Gazules no es solo un lugar para explorar, sino también para entender y disfrutar, donde cada rincón cuenta una historia y cada plato se convierte en un recuerdo imborrable.
Este es el mapa de las localidades más infravaloradas de España según la revista Viajar:
