El verano parece que ha hecho que se olvide la situación de sequía. La llegada de las vacaciones y el hecho de que en verano no se echen en falta las lluvias han hecho que se deje de hablar de esta problemática, que sin embargo sigue ahí.
Finalizado el mes de agosto y a las puertas de que acabe el año hídrico, la situación en los pantanos de la provincia de Cádiz es más que preocupante. Alarmante cuando menos. Los datos reflejan una bajada importante del agua embalsada respecto a la media de la última década. No todo es malo, hay algo más de agua en los pantanos que el año pasado por estas fechas.
Los embalses de la provincia de Cádiz se encuentran en una situación crítica, con un promedio de llenado del 22,6 por centaje. Esta cifra es la mitad de la media histórica registrada para esta misma fecha en los últimos diez años, que se sitúa en el 46,63 por ciento.
Son datos de las 7:00 horas de este 9 de septiembre de 2024, que reflejan que los embalses de Cádiz contienen actualmente 412 hectómetros cúbicos de agua, frente a una capacidad máxima conjunta de 1.821 hectómetros cúbicos. Esta cifra destaca el serio y preocupante déficit hídrico en comparación con el promedio de los últimos diez años, que solía ser significativamente superior.
Solo tres de los 10 embalses que hay en la provincia están por encima del 50 por ciento de su capacidad. Y solo uno, el de Arcos, supera, ampliamente, el 75 por ciento.
El embalse de Arcos es el que se encuentra a mayor nivel de su capacidad en la provincia, con un 92,88 por ciento de su capacidad total, equivalente a 14 hectómetros cúbicos sobre una capacidad máxima de 14,6 hectómetros cúbicos. En el lado opuesto, el embalse de Zahara-El Gastor se encuentra en una situación crítica. Actualmente, está al 11,74 por ciento de su capacidad, con solo 26 hectómetros cúbicos embalsados de un total de 222,7 hectómetros cúbicos de capacidad máxima. Este embalse es uno de los más afectados por la sequía prolongada y se han visto preocupantes imágenes en vídeo del mismo.
Por su parte, el embalse de Los Hurones, que abastece principalmente a la capital, cuenta con 94 hectómetros cúbicos almacenados, lo que representa un 69,16 por ciento de su capacidad. Aunque es uno de los embalses con mejor situación, su nivel de agua está por debajo de lo esperado en un año hidrológico normal.
La situación actual refleja una severa caída en la capacidad embalsada con respecto a la media de los últimos diez años. Normalmente, los embalses de Cádiz deberían estar alrededor del 46,63 por ciento de su capacidad en esta época del año, lo que indica que en 2024 los niveles de agua son casi la mitad de lo esperado. Este descenso acentúa los efectos de la sequía y plantea un serio desafío para la gestión hídrica en los próximos meses.
