
El terror de la sanidad pública, bendecido por la Marea Blanca. La denuncia de 'Las ratas'

“Bendita Marea Blanca” y bendita pluma de Jesús Bienvenido para visibilizar, una vez más, una problemática social que afecta a todo el mundo.
La comparsa Las ratas ofreció en la noche del lunes 24 de febrero otro repertorio que pasará a la historia del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas (COAC) 2025.
Y es que la agrupación es una de las que está marcando este certamen de coplas. Será difícil olvidar el talento que demuestran las voces de sus componentes, la potente sonoridad musical que defienden y, por supuesto, la fina lírica tan necesaria de su autor.
En la segunda sesión de semifinales, estas ratas tenían todavía mucho que soltar, tras haberse puesto ellos mismos el listón muy alto. Volvieron a enganchar al teatro y lo hicieron con mensajes que ponen la piel de gallina, por la crudeza de los mismos.
El primer pasodoble denunciaba la crítica situación en la que se encuentra la sanidad pública, a la que caracterizan, como si de un género cinematográfico se tratase, de terror, “que implora” una necesaria “protección”, que cada vez se hace más evidente, “temblando frente al paredón donde te apunta la suerte”.
Duramente, la comparsa refiere que "Un estado terrorista es aquel que causa terror y pánico entre su gente”. La elección de la palabra terrorista no es casual, pues equipara la gestión de la sanidad pública con una forma de violencia de Estado, que con “con armas o sin armas, los va privando de su salud hasta darles muerte."
Aquí se refuerza la idea de que no hace falta una guerra convencional para que un Estado ejerza violencia contra su pueblo. Los recortes y la privatización del sistema sanitario son las armas invisibles que van minando la vida de los ciudadanos.
El mensaje sigue apelando al terror, como aquel que hace que la vida te dañe, “con una mirada hostil” y encima “se ríe de ti”, “recordándote lo efímero que eres”. Ese terror que nos causa que la vida se nos vaya, apuntada en una lista de espera, y ese mismo sentimiento de terror que nos provoca al ver que “la sanidad se recorte sin piedad”.
Bienvenido refleja el miedo real de los pacientes que ven cómo su salud depende de una burocracia saturada y unos recortes implacables. Además, pone el dedo en la llaga con respecto a la comercialización de la sanidad, remarcando la desigualdad social que se produce mediante “el terror de tanto tienes tanto vales”, pues continúan “privatizando hospitales, sin vergüenza, ni moral”.
Sin embargo, en medio de la desesperanza, surge un rayo de luz denominado personal sanitario, “en medio de tanto mar” considerado “obrero de la salud, la vida y la sanidad”.
El reconocimiento a los sanitarios es el corazón de esta letra. Son ellos, los profesionales que sostienen el sistema, con esfuerzo y vocación, quienes impiden que el colapso sea total.
Finalmente, el pasodoble culmina con una declaración de admiración y gratitud hacia la Marea Blanca, movimiento en defensa de la sanidad pública, todo un símbolo de lucha contra el desmantelamiento del sistema sanitario.