
El Pase Callejero de Romanceros se celebra desde el martes al jueves en el barrio de Santa María
Durante tres noches actuará lo más destacado de la modalidad del cartelón

El Carnaval de Cádiz sigue su curso y, como cada año, los romanceros toman las calles.
El Romancero es probablemente una de las formas de hacer carnaval más antiguas de nuestra fiesta. Aunque con concurso propio, sigue siendo una agrupación fundamentalmente callejera. Denostada hasta hace poco, en los últimos años ha experimentado una expansión tanto en número de participantes como en formatos.
La Asociación de Romanceros de Cádiz (ARO) organiza desde este martes el Pase Callejero de Romanceros en la calle Santiago Donday, junto al ambulatorio de la Merced.
Durante tres noches consecutivas, a partir de las 21:00 horas, diferentes romanceros, algunos participantes del Concurso Oficial y otros exclusivamente callejeros, se darán cita en el barrio de Santa María.
A continuación, se muestran los romanceros participantes de las diferentes veladas que se darán martes, miércoles y jueves:
Martes 4 de marzo
- Aquí donde me ves por una chispa no soy rey
- Hilma af klint de la calle pasquín
- Mi niño no ha hecho
- ¿Quién no ha dicho ole?
- Este año voy a salir
- La trinchera de los tranchetes
- Larga vida a la reina
- La colirio
Miércoles 5 de marzo
- El chano: de vuelta de tó
- El rentista se la da de artista
- Este tío es un hueso
- En la carpa yo te espero
- Se le está viendo el plumero a este
- Buitre carroñero
- Y to por un bujero
- Las auténticas aventuras de didpul
- Este muerto está muy vivo
- Cuidadito que vienen curvas
Jueves 6 de marzo
- Te puede pasar a ti
- Quillo, todo el día dando la nota
- Lo que el levante nos dejó
- Po a mí me gusta, joé
- El pagafantas
- Vagoman
- Los pekadí capitale
- A baba ba ba caer, a baba bia va a caer
- To va a pringá
- Pepe el espía
¿Qué es un romancero?
El romancero es una modalidad del carnaval considerada como una de las más antiguas de la fiesta gaditana. Se trata de una agrupación fundamentalmente callejera basada, normalmente, en uno o dos intérpretes como mucho.
Su actuación se basa en recitar un texto, con rima, donde el romancista (recitador) relata hechos, historias o experiencias propias y caracteriza un tipo mediante un disfraz.
El romancero lleva consigo un cartelón, que es un panel, donde alude a una representación gráfica de su temática y mantiene una vara para ir golpeando el cartel un par de veces, lo que se, a oídos del oyente como 'blam blam'.
Su expansión crece por cada año que pasa, pues esta atractiva forma tradicional de carnaval gaditano sigue aumentando en número de participantes como en formato.